BonÁrea sigue cumpliendo plazos en el desarrollo de su plataforma alimentaria de la localidad zaragozana de Épila y trabaja en la planta logística de actividades cross-docking que entrará en funcionamiento tras el verano.
Este proyecto empresarial supondrá para la compañía tener en Aragón toda la integración vertical completa, en una iniciativa que se realiza de forma progresiva, en un período de diez años y supondrá una inversión final de unos 400 millones de euros.
En la actualidad, según el Gobierno de Aragón, un 15% del complejo está finalizado y hasta la fecha se han invertido más de 75 millones de euros, a los que se añaden otros más de 130 millones ya comprometidos.
En este sentido, las autoridades aragonesas han llevado la urbanización exterior de la parcela, con la instalación de las redes de abastecimiento, saneamiento, electricidad, gas y telecomunicaciones y asfaltado los viales.
Igualmente, se han ejecutado dos glorietas, que se suman al ramal de entrada al complejo ya acondicionado, junto con los colectores, así como el resto de infraestructuras del ciclo del agua.
El proyecto es de tal magnitud que se desarrolla en cuatro fases diferentes que abarcan desde 2019 hasta 2029, sobre una parcela de unas 180 hectáreas dentro del polígono industrial El Sabinar del municipio de Épila.