La naviera FRS ha informado que recurrirá la multa de 11 millones de euros impuesta por la Comisión Nacional de la Competencia, CNC, por pactar precios con otras navieras que operan en el Estrecho. La multa impuesta por más de 88,5 millones de euros, sanciona unas prácticas de reparto de mercado y fijación de precios que se habrían desarrollado durante al menos nueve años, entre los años 2002 al 2010.
Se les acusa, a FRS y a otros cinco grupos de navieras, de participar en distintas reuniones con el fin de fijar los precios en los billetes de transporte de pasajeros y vehículos entre la península y Marruecos, así como del reparto de mercado en el periodo señalado.
Para FRS, el planteamiento de la CNC contra sus empresas, FRS Iberia y FRS Marco, es “incomprensible” y, por ello, no comparte la resolución. De este modo, desde la naviera han comunicado que revisarán la decisión de Competencia con sus gabinetes jurídicos y agotará todas las vías jurídicas para rechazar dichas acusaciones y apelar la resolución.
Asimismo, procederán a comprobar la decisión y aplicarán todas las posibilidades jurídicas para defender las acusaciones que se han vertido. Del mismo modo, FRS será "cooperativo con las autoridades, con el fin de garantizar la transparencia y la libre competencia".
Desde FRS han destacado que "hemos contribuido a mejorar el servicio en el Estrecho, trabajando por unos estándares modernos y eficientes, con el objetivo de mejorar la seguridad y la calidad del tráfico de ferrys para los clientes".
Finalmente, opina que las sentencias y su magnitud van a tener "graves consecuenciasen un sector que se encuentra en una situación muy débil debido a la crisis y los cambios generacionales que han demostrado una disminución importante en el número de usuarios en la última OPE (Operación Paso del Estrecho) 2012".
La compañía FRS no ha sido la única en tomar medidas para defenderse de las acusaciones. Acciona Trasmediterránea recurrirá ante la Audiencia Nacional la multa por 25,5 millones impuesta por la CNC a la compañía y a su filial Europa Ferrys, justificando esta decisión al entender que la sanción de Competencia “no se ajusta a Derecho”.