La industria naviera de Alemania y los bancos del país han solicitado garantías que aseguren que el principal accionista de United Arab Shipping Company (UASC), Qatar, mantenga a largo plazo el acuerdo alcanzado en la compra de la naviera árabe por parte Hapag-Lloyd.
El operador resultante de esta fusión se situará en el quinto puesto entre los más grandes del mundo, con 237 buques, capacidad de transporte para 1,6 millones de TEUs, un volumen de transporte anual de 10 millones de TEUs y un volumen de negocio de unos 11.180 millones de euros (12.000 millones de dólares).
Desde el sector bancario han manifestado que una de las principales preocupaciones de la naviera y de los bancos es que Qatar reduzca en un futuro su participación en el grupo mediante la venta de acciones, lo que podría ocasionar que las compañías rivales entrasen a participar en la naviera.
Actualmente, Qatar posee el 51% de las acciones de UASC y Arabia Saudí tiene el 35%, mientras que la parte restante pertenece a Emiratos Árabes Unidos, Iraq, Kuwait y Baréin. En el nuevo operador, Qatar pasará a poseer el 41%, mientras que Arabia Saudí tendrá el 10%.