'La impresión 3D y el futuro de la cadena de suministro'que se puede descargar en este enlace(disponible en formato pdf, en inglés, de 31 páginas y 3,9 Mb).
La impresión 3D está llamada a complementar y redefinir la fabricación, pero no hará desaparecer el modelo actual de producción en masa. Así lo indica el último informe de DHL, 'La impresión 3D y el futuro de la cadena de suministro', para el cual el operador ha probado diversas técnicas de impresión con el fin de identificar qué aplicaciones podrían transformar las estrategias actuales en este ámbito.
La industria se encuentra ante una tecnología transformadora, pero no dejará obsoletas las técnicas actuales. Su gran potencial está más relacionado con su capacidad para simplificar la producción de productos complejos y personalizables, así como piezas de recambio, lo que podría acercar mucho más la logística y la fabricación.
Permite eliminar procesos como la forja o el moldeado a un coste mínimo, pudiendo aumentar la calidad del producto, obtener múltiples unidades a partir de una misma impresora, y desarrollar nuevos modelos, así como nuevas estrategias relacionadas con la cadena de suministro.
Algunos sectores, como el de la aviación, la ingeniería, la automoción o la sanidad ya están trabajando en la implementación de estas impresoras, que también pueden utilizarse para la producción automática en lugares remotos, un servicio muy útil para las compañías mineras, así como agencias espaciales y militares, cuando necesitan fabricar repuestos.
Dificultades técnicas y económicas para su implantación
Sin embargo, esta tecnología ha de enfrentarse a ciertos factores limitantes, como la falta de conocimientos para su utilización, así como dificultades técnicas y económicas. Muchas de las impresoras pueden utilizar únicamente un material, por lo que los costes son aún elevados para su aplicación a nivel industrial.
También se enfrenta a ciertos problemas en el ámbito de la garantía, la responsabilidad civil y la propiedad intelectual. Además, es necesario mejorar su rapidez y agilidad antes de que pueda convertirse en una tecnología básica de producción.
Una encuesta reciente ha revelado que el 38% de las compañías se están preparando para incluir la impresión 3D en su cadena de producciónen los próximos cinco años, pero no necesariamente para reemplazar totalmente la fabricación tradicional. DHL sostiene que su principal uso a largo plazo será la fabricación de repuestos o elementos personalizados.
Su informe pone también en valor las oportunidades de las empresas para asociarse con proveedores logísticos que les ofrezcan este tipo de tecnología, lo que les permitiría fabricar piezas de recambio a demanda y por tanto, reducir los costes de almacenamiento y pensar en una logística de proximidad, en la que la producción se acerque a los puntos de entrega, con el consiguiente acortamiento de la cadena de suministro.
Del mismo, resultará útil para acelerar el proceso de producción de productos sensibles al tiempo y mejorar la personalización, reduciendo el tiempo de espera del cliente.