Los pilotos de Lufthansa han decidido prolongar la huelga iniciada este miércoles hasta la medianoche del viernes 25 de noviembre, con el fin de reclamar un aumento salarial del 3,66% anual, superior al 2,5% que les había ofrecido la aerolínea.
La compañía se ha visto obligada a cancelar 912 vuelos de los 3.000 programados este jueves y calcula que en total, las cancelaciones que se han producido desde el miércoles han afectado a 1.800 vuelosy 215.000 pasajeros.
El sindicato que ha convocado los paros, Vereinigung Cockpit (VC), ha indicado que el principal impacto se ha producido en los de corto alcance, aunque la compañía ha indicado que entre los vuelos cancelados, se incluyen 88 intercontinentales.
No obstante, ha planteado un nuevo programa de vuelos, así como un aumento de la capacidad operando aviones más grandes a través de las aerolíneas del grupo que no han sido llamadas a la huelga, como Germanwings, Eurowings, SWISS, Austrian Airlines, Air Dolomiti, Brussels Airlines y Lufthansa Cargo.
Asimismo, han invitado al sindicato a sentarse a negociar y aceptar una intermediación para llegar a una solución, ya que según la aerolínea, el aumento del 20% en los salarios que solicitan es superior al que han recibido otros empleados.
Por otro lado, la compañía alemana ha anunciado que los clientes cuyos vuelos no puedan ser operados pueden cancelar o cambiar su reserva sin coste adicional.