La Generalitat, a través de la sociedad pública Aerocas, ha anunciado la ruptura del contrato para la gestión del Aeropuerto de Castellón, firmado el 23 de marzo con Globalvía, con “el fin de ahorrar en el proyecto”, entre gastos de construcción y gestión, más de 30 millones de euros en 8 años.
El aeropuerto, fruto de la inversión pública de la Generalitaty de la privada de la concesionaria Globalvía, formada al 50% por Bankia y FCC, se queda así sin la empresa privada que lo gestione y busque aerolíneas que operen en él.
En respuesta a esta ruptura del acuerdo firmado, la empresa adjudicataria ha interpuesto una denuncia en el Juzgado de lo Mercantil de Castellón contra la Generalitat por incumplir el acuerdo de gestión con la firma.
Los bancos endurecen las condiciones a Globalvía
Según ha explicado la Generalitat, la suspensión del acuerdo es “producto del endurecimiento” de las condiciones financieras “exigidas” por los bancos a Globalvía, que provocarían un coste añadido de gestión de otros 21 millones de euros a las previsiones inicialmente fijadas de 29 millones de euros para los próximos ocho años.
Ante la nuevas condiciones, Globalvía trasladó a la Generalitat las exigencias de los bancos, a la vista de las cuales esta habría optado por “una decisión responsable”, dentro de las políticas de austeridad y contención del gasto público del Consell, de no asumir el sobreprecio y buscar otra vía de gestión. Globalvía, por su parte, asegura que las condiciones son las mismas que las firmadas el pasado 23 de marzo de 2011.
Aerocas se ha comprometido a buscar una nueva fórmula de gestión sin Globalvía, “mucho más económica”, que se basará en la contratación de un operador acreditado que puede ser “Aena u otros”, siguiendo el modelo del Aeropuerto de Murcia. Por el momento será Aerocas quien velará por el funcionamiento y por la gestión de la infraestructura.
Sin fecha de apertura
Por lo que respecta a la apertura al tráfico aéreo del Aeropuerto de Castellón, desde la Generalitat han eludido fijar una fecha asegurando que se llevará a cabo “tan pronto como sea posible”. Esto tendrá lugar cuando se cumplan los plazos establecidos por las últimas modificaciones legales y tras la preceptiva autorización del Ministerio de Fomento a través de AESA, que tiene que supervisar las instalaciones terminadas y en perfecto estado de funcionamiento antes de expedir su certificación.