La creciente demanda de minerales en China ha aumentado sus exportaciones globales por vía marítima en un 7% interanual en los primeros siete meses de 2023, superando el modesto crecimiento del 2% en las exportaciones totales de carga seca.
Según señala Bimco en un análisis, las exportaciones de bauxita lideraron el aumento con un 9% interanual, representando el 51% de todas las exportaciones de minerales minoritarios por vía marítima. La bauxita se convierte en alúmina, un componente clave en la producción de aluminio.
La producción de aluminio en China ha aumentado rápidamente desde el inicio de la guerra en Ucrania, gracias a la competitividad mejorada debido a altos precios energéticos en Europa y la creciente fabricación local de automóviles que ha impulsado la demanda interna de aluminio. Así, casi el 80% de las exportaciones de bauxita por vía marítima se dirigen a China.
El aumento en los envíos de bauxita ha beneficiado a los buques graneleros Capesize, que representan el 11% de la demanda total de estos buques. Además de la mayor carga, los envíos de bauxita requieren distancias de navegación un 71% más largas que el promedio de los buques Capesize.
Por otro lado, debido a la prohibición de exportación de Indonesia a partir de junio, las exportaciones de bauxita de Guinea han remplazado gradualmente las de Indonesia. Hasta ahora, las exportaciones de bauxita de Guinea han aumentado un 26% interanual, lo que ha incrementado en un 19% las distancias de navegación promedio para este mineral.
En términos generales, las exportaciones de minerales minoritarios por vía marítima, excluyendo la bauxita, crecieron un 4% interanual entre enero y julio. Este crecimiento se debió a mayores exportaciones de minerales como cromo, níquel y manganeso, utilizados en la fabricación de acero inoxidable y baterías.
Aunque los indicadores económicos chinos han señalado una desaceleración en la actividad económica desde junio, con la caída en el PMI manufacturero, la producción de automóviles y la refinación de alúmina, se espera que las exportaciones de minerales menores sigan aumentando a medio y largo plazo.
En este sentido, la descarbonización del sector energético impulsa la demanda de minerales como aluminio, cobre y níquel.