La flota global de contenedores equipados con tecnología telemática se multiplicará por seis en los próximos cinco años, llegando a representar el 30% del total de contenedores para el año 2027, lo que vendrá impulsado especialmente por el crecimiento en el ámbito de la carga seca.
Esta es una de las principales conclusiones de un reciente informe publicado por Drewry, que explica que los contenedores inteligentes han ganado importancia en los últimos años, especialmente a raíz de la pandemia del Covid-19, con las consiguiente interrupciones de la cadena de suministro. La situación hizo necesario impulsar una mejor visibilidad ante unos tiempos de tránsito más largos y volátiles.
Precisamente, se espera que el ritmo de incorporación de los contenedores inteligentes se acelere en los próximos cinco años, a medida que se reduzcan los costes de los dispositivos y los operadores pioneros en esta materia inspiren a los que vienen por detrás.
Un contenedor se considera inteligente cuando está equipado con un dispositivo telemático que facilita a los operadores el seguimiento y la monitorización en tiempo real. También permite que los cargadores puedan conocer la ubicación y estado de su carga para controlar mejor sus cadenas de suministro.
A pesar de las débiles condiciones que está experimentando el mercado, las navieras tienen fondos para invertir y ven oportunidades para mejorar la eficiencia de sus operaciones a través del despliegue de contenedores inteligentes.
Drewry estima que para finales de 2022, alrededor del 5,6% de la flota mundial de contenedores estaba equipada con tecnología inteligente, tras un crecimiento del 57% a lo largo del año.
Sin embargo, aunque existe una penetración ya muy fuerte en lo que respecta a los contenedores refrigerados e intermodales, es mucho menor en el sector de los contenedores para carga seca. Más de la mitad de las flotas de contenedores intermodales marítimos refrigerados y terrestres son inteligentes, frente a un tercio el año pasado, según estimaciones de la consultora.
En este contexto, Drewry anticipa que la cantidad de contenedores inteligentes dentro de la flota global se incrementará en los próximos cinco años, hasta llegar a más de 10 millones de unidades, lo que representa hasta el 30% del total de contenedores en todo el mundo.
A medida que la innovación tecnológica reduzca el coste de los dispositivos y aumente su valor tanto para los operadores como para los propietarios beneficiarios de la carga, se espera que la adopción se acelere.
Impulso en los contenedores de carga seca
Además, el impulso de la flota inteligente ahora vendrá de la mano de los contenedores de carga seca, donde la penetración es actualmente del 0,7%. Varias navieras, incluidas Hapag-Lloyd y ONE, se han comprometido a equipar toda su flota de contenedores de este tipo con dispositivos inteligentes.
Cabe apuntar que las iniciativas anteriores en este ámbito fracasaron porque dependían de la demanda de los cargadores, que se vio afectada por las tasas adicionales y la falta de integración en las ofertas de servicios de IoT de los operadores. En este caso, el retorno de la inversión provendrá de la optimización de la flota y las operaciones de carga.
Además, la digitalización de las flotas de contenedores permitirá a las navieras controlar mejor los flujos de información de la cadena de suministro marítimo, mejorando la visibilidad de la carga y llevando así a los clientes a compromisos contractuales a más largo plazo.
Para lograr este cambio, se requerirá una mayor inversión para integrar los contenedores inteligentes en los sistemas IoT de los operadores, y la colaboración entre las partes interesadas para el intercambio de datos. Mientras tanto, se espera que las navieras se concentren en crear una masa crítica de dispositivos inteligentes instalados para aprovechar sus beneficios operativo, mientras se preparan para un cambio en la oferta de servicios de visibilidad.