En el tercer trimestre de 2018, la división de transporte marítimo de Maersk ha obtenidos unos ingresos de 7.321 millones de dólares (6.468 millones de euros), un 32% más que hace un año, con un beneficio de 925 millones de dólares (817 millones de euros), lo que supone un incremento del 15,6% anual.
Los volúmenes manipulados han repuntado un 27%, cifra que se reduce al 5% si no se tienen en cuenta los datos de Hamburg Süd, aunque la cifra sigue estando por encima de la media del mercado, que alcanza el 2,7%.
Los resultados se han visto alterados por el ciberataque sufrido en junio de 2017, que tuvo un impacto muy negativo entonces en los ingresos del grupo. Las tasas de carga han aumentado un 5,5%, principalmente por las rutas Norte-Sur y Este-Oeste, donde se han incrementado un 5% y las conexiones regionales internas, con un ascenso del 19%.
En cuanto a los costes del combustible son ahora un 47% más altos. Los recargos de emergencia por este aumento han comenzado a aplicarse desde el segundo trimestre de 2018, lo que sumado a un equilibrio más ajustado entre la oferta y la demanda ha llevado a un incremento de la media de las tasas de carga entre julio y septiembre.
La ruta entre Asia y Europa es la que ha registrado un peor resultado en el tercer trimestre por el descenso de las importaciones desde Asia hacia Reino Unido, Turquía y el Mediterráneo.
La naviera ha logrado satisfacer las necesidades del cliente en el tercer trimestre, pese a que su fiabilidad en cuanto a los tiempos de llegada se ha reducido ligeramente por las condiciones climatológicas, que han motivado el cierre de puertos y retrasos en los atraques. Además, los movimientos portuarios por hora han llegado a 82,8, un 14% más que en 2017.
No obstante, la integración de la naviera alemana Hamburg Süd sigue dando alegrías al grupo, reportando unos 290 millones de dólares (256 millones de euros) en sinergias hasta la fecha, aunque la previsión es llegar a 500 millones en 2019 (442 millones de euros).