La facturación de hipermercados, supermercados, autoservicios y establecimientos ‘cash&carry’ en la Península Ibérica se ha situado en 100.050 millones de euros en 2015, un 1,8% más que en el ejercicio anterior, en un contexto de mejora del consumo de los hogares, según el Observatorio Sectorial DBK.
El aumento del número de visitas a los establecimientos y la creciente importancia de los productos frescos en la cesta de la compra están favoreciendo el ascenso de las ventas de las tiendas de proximidad, en detrimento del negocio generado por los hipermercados. Así, el volumen de negocio de los supermercados y autoservicios ha crecido un2,4% en 2015, situándose en77.340 millones de euros.
Los hipermercados han reducido su cuota de mercado, disminuyendo su facturación un 0,6% hasta los 17.475 millones de euros. La actividad de los 'cash & carry', por su parte, se ha visto impulsada por el aumento del negocio en el sector de la hostelería y el incremento de la demanda turística. En 2015 han contabilizado unos ingresos agregados en España y Portugal de 5.235 millones de euros, un 1,5% más que en 2014.
El valor del mercado en España ha ascendido un 1,9% hasta alcanzar los 85.520 millones de euros, lo que ha supuesto el 85,5%del total, mientras que en Portugal se ha situado en 14.530 millones, con un crecimiento del 1%.
Previsiones para 2016
Las condiciones del mercado siguen mejorando en 2016, previéndose para el cierre del año un volumen de negocio en el conjunto del mercado ibérico de 102.330 millones de euros, lo que supone un2,3% más que en 2015.
El segmento de 'cash & carry' ganará peso en el sector, estimándose un ascenso de sus ingresos del 3,5%en 2016. Asimismo, las ventas de los supermercados y autoservicios seguirán creciendo por encima de la media del sector.
Las principales empresas tienden a incrementar el número de referencias a la venta e introducir nuevos formatos y variedades.
Por otro lado, destaca el moderado descenso de la cuota de mercado de las marcas de la distribución, en favor de una mayor diversidad de artículos de diversos fabricantes, así como las mejoras en la oferta de productos frescos y platos preparados y la ampliación de la cartera de productos locales.
La transformación digital, por su parte, concentrará buena parte de las inversiones previstas por las empresas de cara a los próximos años.