En un año marcado por el inicio de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, la consultora Clarkson ha registrado un crecimiento del 2,6% en la capacidad de la flota, por debajo del nivel de 2017, pero similar al que se espera en 2019, llegando a los 2.000 millones de toneladas en 2020.
La demanda de transporte marítimo se ha incrementado a un ritmo muy parecido, del 2,7%, con 11.900 millones de toneladas, si bien en el ejercicio anterior, aumentó un 4,2%. Además, el nivel de reciclaje se ha reducido un 12% hasta los 31 millones de toneladas, aunque en el sector de los petroleros se han alcanzado niveles muy elevados, según recoge Anave.
Por su parte, el precio de los buques de nueva construcción ha repuntado un 10% y el de las embarcaciones de segunda mano, entre un 3% y un 5%. Los encargos en el primer caso han caído un 14% en cuanto al tonelaje, aunque sobresale el segmento de los buques para el transporte de GNL, con 69 pedidos.
De momento, la consultora ha mostrado sus dudas sobre el futuro de la oferta y la demanda con los nuevos límites de azufre en el combustible que entrarán en vigor en el año 2020. En lo que respecta a los precios, han aumentado un 12% para los graneleros y un 28% para los portacontenedores, mientras que en los petroleros, han llegado a su nivel más bajo desde los 90.