La aerolínea KLM ha completado el primer vuelo de pasajeros realizado parcialmente con queroseno sintético producido de forma sostenible.
El avión partió el 22 de enero del Aeropuerto Schiphol de Ámsterdam con destino Madrid, con una mezcla de este combustible producida por Shell en su centro de investigación de Ámsterdam, utilizando CO2, agua y energía renovable.
Aunque con su renovación de la flota ya ha contribuido significativamente a la reducción de emisiones, el aumento de la producción y el uso de combustibles de aviación sostenibles marcarán la diferencia en la actual generación de aviones.
Los Países Bajos están actualmente muy centrados en el impulso de los combustibles sostenibles para la aviación, ya sean biocombustibles o queroseno sintético. El objetivo es que las aerolíneas europeas puedan volar utilizando únicamente combustibles respetuosos con el medio ambiente de cara a 2050.
Producción de combustibles sostenibles
En este sentido, el gobierno neerlandés está apoyando varias iniciativas para estimular su producción y uso, como el proyecto de la primera fábrica europea de bioqueroseno sostenible en Delfzijl, en el que SkyNRG colabora con KLM, el aeropuerto de Schiphol y SHV Energy.
Además, la start-up Synkero está trabajando con el puerto de Ámsterdam, Schiphol, KLM y SkyNRG en el desarrollo de una planta de queroseno sintético en el recinto portuario.
También destaca la iniciativa Zenid, en la que participan Uniper, el aeropuerto de Rotterdam-La Haya, Climeworks, SkyNRG y el aeropuerto de innovación Rotterdam-La Haya, para la construcción de una fábrica de pruebas de queroseno sostenible en Rotterdam, utilizando el CO2 capturado del aire.
Respecto a España, acaba de firmar una declaración conjunta con los Países Bajos, Francia, Suecia, Alemania, Finlandia y Luxemburgo para potenciar la sostenibilidad del sector de la aviación y alcanzar los objetivos climáticos de la UE.