Kion desarrollará y producirá sus propios sistemas de pilas de combustible de 24 V para sus equipos de almacén, una tecnología en la que va a invertir más de 11 millones de euros y que tiene previsto lanzar en la primavera de 2023.
Esto significa que pronto podrá ofrecer a sus clientes todo lo que necesitan: la carretilla elevadora, las pilas de combustible y el servicio asociado, siendo el único fabricante de carretillas elevadoras y equipos de almacén en Europa que producirá sus propias pilas de combustible.
Las ventajas de la tecnología de pilas de combustible son múltiples, pues no generan emisiones durante la operativa. Si el hidrógeno también proviene de fuentes renovables, como biogás o la electrólisis de energía solar o eólica, será climáticamente neutra.
Otra ventaja se pone de manifiesto durante el repostaje, que lleva de uno a tres minutos, lo que ayuda a minimizar las interrupciones y aumenta la disponibilidad de las unidades.
Estas pilas de combustible tampoco contienen ácidos tóxicos ni otros contaminantes, una ventaja no solo en términos de reciclaje, sino también para el funcionamiento diario.
Nueva estación de hidrógeno
El grupo está construyendo su propia estación de servicio de hidrógeno en las instalaciones de Aschaffenburg, en Alemania. Una vez finalizadas las obras, entrarán en funcionamiento 21 sistemas híbridos de pilas de combustible y se sustituirán la mayoría de carretillas con motor de combustión.
La filial de Kion, Linde Material Handling, comenzó la producción en serie de sus primeros vehículos de hidrógeno en 2010. Hoy, alrededor del 80% de sus modelos están disponibles con esta tecnología, incluidas transpaletas, tractoras o carretillas retráctiles y contrapesadas.
El hidrógeno también ha sido una parte fundamental de la cartera de productos de Still, que ha estado implementando proyectos regulares de hidrógeno para varios tipos de vehículos desde 2003 y opera una de las flotas más grandes de Europa de carretillas elevadoras de hidrógeno para un cliente en Francia.