Un año después de comenzar sus operaciones en la terminal de Bouzas, Höegh Autoliners aumentará la frecuencia de su conexión con el puerto de Veracruz, en México, a dos escalas al mes, según indica El Faro de Vigo.
Este incremento viene motivado por el volumen de exportación de PSA. Cada barco que sale hacia México carga 400 vehículos fabricados en la planta de Balaídos, por lo que, de mantenerse esta media, se situaría el registro anual en 9.600 unidades.
La terminal ya ha experimentado algún problema de congestión en el último año. De hecho, en una ocasión, una gran cantidad de vehículos permaneció en la campa de Bouzas durante varias semanas, a la espera del buque de la naviera.
Por ello, se ha dedicido establecer una segunda frecuencia regular para este itinerario, que antes de la llegada a Vigo, tiene parada en Bremerhaven (Alemania), Amberes (Bélgica) o Le Havre (Francia) para recoger vehículos de otros fabricantes.
Así, cuando llega a la terminal viguesa, el buque cuenta con un alto porcentaje de sus bodegas ocupadas pero dispone de espacio suficiente para las unidades de PSA. Tras salir del puerto, la nave se dirige a Tánger (Marruecos) antes de cruzar el Atlántico rumbo a Guadalupe, Martinica y Guyana Francesa.
Es en estas islas donde Höegh comienza a descargar vehículos o los reenvía, realizando el transbordo a embarcaciones más pequeñas, hacia otros lugares, como Cuba.
Desde aquí, la naviera continúa hasta Cartagena de Indias, en Colombia, donde realiza la última escala antes de atracar en el puerto de Veracruz. Las dos últimas paradas, antes de iniciar de nuevo la ruta en la localidad alemana de Bremerhaven, son en Jacksonville y Baltimore, en Estados Unidos.