Hella, dedicado al sector de la iluminación y con amplia experiencia en el campo de la iluminación LED, ha equipado al nuevo monovolumen Clase V de Mercedes-Benz con faros, pilotos traseros y el interior con tecnología LED.
Los faros, 100% LED, en forma de ala, proporcionan un aspecto definido a la parte frontal del vehículo. El intermitente se extiende a lo largo de toda la parte superior del faro gracias a los diversos reflectores montados en sus propias cámaras. Debajo se encuentran la luz de conducción diurna y la luz de posición, que se han desarrollado mediante elementos conductores de la luz con forma ondulante. Las luces de giro, de cruce y de largo alcance ocupan la parte inferior del faro.
En concreto, estas últimas funciones se crean mediante el módulo VarioLED desarrollado por Hella. Se trata de un módulo de proyección AFS, o Sistema de iluminación Frontal Adaptativa, basado en una tecnología que emplea un obturador cilíndrico sobre cuya superficie se generan diferentes contornos. Dependiendo de la distribución de la luz que se necesite, el obturador rota dentro del módulo de iluminación y así se cambia de manera totalmente automática de luz de cruce a luz de largo alcance o luz de autopista.
De esta manera, el alcance luminoso y la distribución de la luz se regulan de modo dinámico y se ajustan a cada tipo de situación. Así puede detectarse mucho antes el estado del tráfico, los peatones o incluso los peligros potenciales. La luz de giro proporciona una seguridad adicional cuando deban realizarse maniobras de aparcar o de girar. Los faros también están disponibles con fuente lumínica halógena como equipamiento básico.
Excepto la luz de marcha atrás, todas las funciones lumínicas del piloto trasero utilizan tecnología LED. La luz de situación, con formas estriadas, destaca por ser muy llamativa. La luz de freno se genera entre las mencionadas formas estriadas por medio de una óptica Fresnel. Esta técnica permite dirigir de manera muy acertada la luz de los diodos luminosos para que ambas funciones se diferencien claramente entre sí, incluso estando situadas tan cerca, permitiendo distinguirlas a la perfección.
Gracias al empleo de materiales translúcidos de color rojo se acentúa la efectividad de dicho color, ya que, cuando se activan los LEDs, las formas estriadas de la luz de situación tienen la apariencia de un cuerpo luminoso. De esta manera se crea una iluminación especialmente homogénea.
Gracias a todo ello, y a un rápido tiempo de respuesta de los diodos luminosos, se logra mejorar notablemente la seguridad en la carretera. La parte interior del piloto trasero queda delimitada mediante un elemento conductor de la luz, ligeramente arqueado y con el contorno iluminado, que lleva a cabo la función del intermitente. Los pilotos traseros también pueden adquirirse en su versión básica, en la que todas las funciones se realizan con lámparas incandescentes.
Con respecto al interior, además de diversos pilotos interiores, como la luz de lectura o la del tablero de instrumentos, Hella también suministra la unidad de mando del techo.