H&M estima que su cadena de suministro sigue sometida a interrupciones y retrasos, aunque, al tiempo, también observa una progresiva y palpable mejora en su funcionamiento.
Ante esta realidad, la cadena textil ha incrementado su nivel de inventario en un 16% con respecto a 2021.
Según sus cálculos un 20% de este incremento se debe al adelanto de pedidos para evitar los desajustes que se perciben en la cadena de suministro, para hacer frente a los incrementos en los costes logísticos y para reajustar existencias destinadas inicialmente a Rusia y que se han tenido que desviar a otras localizaciones.
Pese al contexto, la multinacional asegura que sus ventas del segundo trimestre de 2022 se han incrementado un 17%, aunque, al tiempo, también prevé que las de este mes de junio se contraigan un 6%.
Así pues, la compañía acelera su expansión en Iberoamérica al tiempo que impulsa su integración omnicanal, aprovechando el regreso al canal físico que se está produciendo una vez superada la pandemia, y acrecienta sus esfuerzos para mejorar la eficiencia de su cadena de suministro.
En este sentido, H&M está llevando a cabo diversas iniciativas en el ámbito logístico entre las que se cuentan algunas relacionadas con la reducción de emisiones contaminantes, con el objetivo de recortarlas en un 56% para 2030.
De igual manera, el grupo textil también está implantando una novedosa tecnología de trazabilidad basada en blockchain, con un piloto que se está desarrollando a lo largo de este ejercicio en el que están involucrados centenares de proveedores, con el fin de lograr una mayor transparencia en el suministro.