La naviera italiana Grimaldi tiene previsto poner en marcha el próximo mes de julio una nueva línea marítima entre el puerto de Barcelona y el norte de Italia, según han confirmado a cadenadesuministro.es Guido y Eugenio Grimaldi, directores comerciales de líneas Short Sea de la naviera italiana, durante su asistencia al SIL 2012 de Barcelona.
Los responsables no han querido desvelar todavía con qué puerto italiano se establecerá esta nueva conexión con Barcelona, pero sí han avanzado que la previsión es que tenga tres relaciones semanales. “Estamos estudiando cuál es el puerto con mejores posibilidades para no perjudicar las líneas existentes, pero vemos mercado potencial”.
Además, también han adelantado que el servicio Barcelona-Livorno se incrementará con cinco salidas semanales desde julio hasta octubre, “aunque el objetivo es que se pueda mantener después de esta fecha”, ha señalado Guido Grimaldi.
Nueva Terminal
Respecto a la nueva terminal que Grimaldi gestionará en el puerto de Barcelona tras la reciente concesión que ha obtenido, los responsables esperan que a finales de año puede iniciarse la primera fase del proyecto. Se trata de una concesión de 15 años prorrogables para construir y gestionar esta nueva terminal de transporte marítimo de corta distancia en el muelle Costa. El grupo italiano invertirá un total de 22 millones de euros en esta instalación, que tendrá 74 hectáreas de superficie.
Según Guido Grimaldi, “es un proyecto muy importante por la inversión que requiere, tanto en la terminal en sí como en los buques necesarios para darla servicio” Nuestro objetivo, apunta, “es ser competitivos en todo el ciclo de la carga entre España e Italia y por ello, Barcelona es un punto estratégico”. En esta nueva terminal, “también tendrá un papel muy relevante la manipulación de vehículos nuevos, sobre todo con Seat”.
Por lo que se refiere al puerto de Valencia, donde Grimaldi tiene también una presencia muy destaca, avanzan que existe un proyecto para conectar este enclave con el west africano, y dirigido al tráfico de coches de segunda mano que se envían a esta área.
Inversión de 2.500 millones
Tanto Guido como Eugenio Grimaldi opinan que la actual coyuntura económica no es buena, “sobre todo con el precio del combustible que está repercutiendo al alza los costes de las navieras en un 50%”.
Sin embargo, la compañía mantiene cartera de pedidos de nuevos buques, que le ha llevado a invertir desde 2007 unos 2.500 millones de euros en 25 nuevos barcos, de los cuales 12 se destinan en exclusiva al transporte short sea shipping entre Italia y España.
Estas inversiones son fuertes, “pero están bien planificadas desde el principio, por lo que la crisis no nos está afectando excesivamente”, afirman.
Autopistas del mar, en igualdad de condiciones
Cuestionados sobre la posibilidad de que España e Italia lleguen a un acuerdo para fomentar autopistas del mar al modo de la que ya funciona entre Gijón y Saint Nazaire, Guido asegura que no cree en este concepto de línea subvencionada. “Se produce una competencia desleal entre las navieras”. En su opinión es mucho más positivo medidas como el ecobono “donde se subvenciona al transportista por llevar su carga en barco, pero él es el que elige la línea y la naviera que más le interesa”. Por este motivo, espera que este sistema para quitar cargas de la carretera y traspasarla al barco se debe establecer en todos los países de Europa.
Finalmente, apuesta por una intermodalidad real entre ferrocarril y marítimo “el ideal sería que la carga salga en tren desde Madrid y llegue a Valencia o Barcelona para su traslado en barco a Italia y allí, nuevamente, se monte en el tren hasta Milán o cualquier otro punto”. Sin embargo, cree que para conseguir eEs objetivo aún falta tiempo.