Ford ha puesto en marcha una investigación centrada en explorar el potencial del hidrógeno como fuente de energía para su vehículo comercial totalmente eléctrico, la E-Transit, cuyo objetivo es determinar si la tecnología de pila de hidrógeno puede aumentar la autonomía del vehículo en situaciones de uso intensivo de energía.
El consorcio, en el que participa Ford junto con seis líderes en tecnologías automotrices y operadores de flotas, cuenta con el apoyo financiero parcial de la organización sin fines de lucro Advanced Propulsion Centre.
Otros socios del proyecto incluyen a BP, encargado del suministro y los requisitos de infraestructura de hidrógeno; Cambustion, encargado de probar el sistema de pilas de combustible; Viritech, encargado del diseño de sistemas de almacenamiento de hidrógeno; y Cygnet Texkimp, proveedor de herramientas de fibra de carbono para los recipientes a presión.
La marca utilizará este estudio piloto para adquirir experiencia en la conversión de vehículos. Para lograrlo, contarán con el apoyo in situ de ingenieros y especialistas en la E-Transit en los centros técnicos de la empresa en Dagenham y Dunton, en Essex, Reino Unido.
Asimismo, y como parte de un proyecto que durará tres años, una flota de prueba compuesta por ocho Ford E-Transit de pila de hidrógeno circulará hasta 2025 en períodos de seis meses.
Los datos obtenidos proporcionarán información sobre el costo total de propiedad y uso de una furgoneta de gran tamaño con una autonomía mejorada, sin emisiones y con un tiempo de actividad equivalente al de una furgoneta diésel.
Los prototipos de Ford E-Transit estarán equipados con una pila de combustible de alta potencia y una unidad de almacenamiento de hidrógeno optimizada en términos de seguridad, capacidad, costo y peso. Un aspecto destacado de este proyecto será la evaluación de la eficiencia y viabilidad del reciclaje de los componentes al final de su vida útil.
Investigación desde 1990
Las pilas de hidrógeno generan electricidad al combinar hidrógeno y oxígeno, y su único subproducto es agua. El sistema utiliza el depósito de hidrógeno como una "batería de gas" para mejorar la autonomía y ofrecer una carga más rápida en comparación con las baterías sólidas y los cargadores convencionales conectados a la red eléctrica utilizados en los vehículos eléctricos.
Ford ha estado investigando la tecnología de pila de combustible desde la década de 1990 y, durante este tiempo, ha desarrollado numerosos prototipos y ha trabajado en colaboración con sus clientes para perfeccionar los vehículos de flotas.
A nivel europeo, la compañía continúa participando en diversos programas financiados con fondos públicos que exploran el uso de tecnologías basadas en el hidrógeno, tanto para vehículos de motor de combustión interna como para aquellos impulsados por pilas de combustible.