Si bien es cierto que en la mayoría de los puertos europeos ya existe la posibilidad de realizar el bunkering de GNL, España está llamada a convertirse en uno de los actores principales en este mercado. Para empezar, cuenta con una localización geoestratégica en el Mediterráneo, una gran capacidad de aprovisionamiento y numerosas infraestructuras gasistas.
En la actualidad, cuenta con seis plantas de regasificación operativas y una más en hibernación, lo que representa el 40% de la capacidad total de almacenamiento en Europa. De hecho, es el país europeo con más terminales de GNL. Una de las claves para el desarrollo del bunkering de gas natural licuado en España ha sido, sin duda, el proyecto Core LNGas hive, con más de 39 iniciativas y una inversión total de 139 millones de euros para la adaptación de las plantas de regasificación españolas para el abastecimiento a buques.
Después de más de 50 años de historia del GNL en España, este proyecto ha permitido desarrollar una logística innovadora, competitiva y sostenible, capaz de adelantarse en cinco años a lo exigido por las Directivas comunitarias.
Cifras de 2019
En 2019, se han realizado en los puertos españoles casi 200 operaciones de abastecimiento de Gas Natural Licuado como combustible a buques, en las que se han suministrado un total de 81.704 m³ de GNL. Esto supone que, respecto a 2018, se han triplicado este tipo de operaciones, puesto que en aquel momento se realizaron 60, con un suministro total de 4.504 m³. Del total de operaciones realizadas, en 165 el bunkering se ha realizado del camión al barco y en 30, desde una barcaza de abastecimiento.
[sumario]El Gas Natural Licuado es la única alternativa real a corto y medio plazo para la reducción de emisiones en el transporte marítimo.[/sumario]
Para ello, se han utilizado el Coral Methane, con 7.551 m³ de capacidad; Coral Fraseri, de 10.000 m³, Cardissa, de 6.000 m³, y Engie Zeebrugge, con una capacidad de 5.000 m³. Solamente en el puerto de Barcelona, se han llevado a cabo 19 operaciones de bunkering ‘ship to ship’. Por su parte, en Algeciras, Balearia ha realizado recientemente la primera operativa de bunkering de GNL en el buque Bahama Mama, que ha sido remotorizado para el uso de este combustible.
Así, se ha transferido el gas desde un camión cisterna hasta los tanques del ferry que cuenta con una capacidad de almacenaje de 280 m³ y autonomía para navegar 750 millas. La misma embarcación ha recibido posteriormente suministro en el puerto de Denia con el sistema ‘multitruck-to-ship’ gracias a dos camiones de ESK. Nuevos avances La primera operación de este tipo realizada en España tuvo lugar a finales de 2019 en Huelva, con tres cisternas suministrando al mismo tiempo GNL al buque Marie Curie del operador.
Este sistema permite realizar la operativa a una velocidad seis veces superior al aumentar el caudal de transferenciay, por tanto, es posible reducir el tiempo que debe estar el buque amarrado en el puerto. Esta modalidad también está disponible en el puerto de Valencia, donde se ha probado con el Hypatia de Alejandría. Mientras, en el de Barcelona, la naviera inició este tipo de bunkerings en marzo con el ferry Abel Matutes. Por su parte, Brittany Ferries, ha ampliado su contrato con Repsol para el abastecimiento de GNL en las rutas españolas de larga distancia.
En virtud de este acuerdo, la compañía energética también se ha comprometido a construir dos nuevas instalaciones de bunkering en los puertos de Bilbao y Santander. El objetivo es que las embarcaciones del operador puedan repostar combustible de manera regular, flexible y fiable cuando atraquen en España. Precisamente en el puerto de Bilbao, que tiene en marcha varias iniciativas para potenciar el suministro de GNL a buques, va a entrar en servicio un nuevo remolcador alimentado con GNL y gasóleo. Además, ya se está trabajando en un nuevo Plan Energético.
En cuanto al puerto de Cartagena, donde el bunkering de gas creció un 10% en 2019, se está desarrollando un proyecto de adaptación y mejora de los atraques norte y oeste del Muelle Príncipe Felipe para el GNL, con una inversión de 9,7 millones de euros. En el de Almería, han finalizado en 2020 los trabajos de adaptación de cinco muelles para poder suministrar GNL a las navieras que atracan en el puerto con sus buques. En el caso de Balearia, que opera entre esta instalación y los puertos de Melilla y Nador, ya ha solicitado a la Autoridad Portuaria el suministro de este combustible para sus ferries. El abastecimiento se realizará con camiones cisterna en un tiempo estimado de 60 minutos.
En el de Ferrol, ya han mostrado su apoyo a la iniciativa de Reganosa para convertir al puerto en el gran hub logístico del noroeste europeo. De hecho, la terminal es ya la tercera más utilizada del país, solamente por detrás de las de Bilbao y Huelva. El plan pasa por garantizar el suministro a buques no solamente en la terminal, sino también en el Puerto Exterior y en zonas de fondeo próximas, utilizando un barco para el suministro. Además, se habilitarían diferentes plantas en otras zonas de Galicia, a las que abastecería este mismo buque, pero también camiones cisterna.
Mientras, en El Musel, siguen trabajando para la puesta en marcha de su terminal de GNL, que permanece en hibernación desde el año 2013 por orden judicial, pero que podría empezar a funcionar en cualquier momento. Por último, conviene apuntar que la Unión Europea subvencionará, a través del mecanismo ‘Conectar Europa’, algunos proyectos relacionados con el bunkering. Por un lado, contribuirá a la financiación de la construcción de una barcaza de suministro que utilizará el puerto de Barcelona. Por otro, destinará fondos comunitarios a la construcción de una instalación de abastecimiento de Enagás en el puerto de Algeciras.
El futuro del bunkering en España
Hasta el 30 de abril de 2030, se han realizado en el país 185 operaciones de bunkering, duplicándose el volumen suministrado respecto al mismo periodo del año anterior. De ellas, la mayoría corresponden al sistema ‘multitruck-to-ship’, aunque 56 han sido de ‘truck-to-ship’ y otras 12 de tipo ‘ship-to-ship’. Las soluciones a GNL implican una elevada inversión inicial, que sin embargo es posible amortizar en un periodo corto de tiempo.
Tal y como aseguran desde Enagás, es la única alternativa real a corto y medio plazo para la reducción de emisiones en el transporte marítimo. Entre sus ventajas, destaca su precio estable y competitivo frente a la volatilidad de los combustibles convencionales, así como la reducción del ruido en un 50%. En España, anteriormente el suministro se realizaba bajo la modalidad de servicio comercial, pero con la trasposición del nuevo reglamento en marzo de 2019, pasó a ser considerado servicio portuario, lo que exige ciertas modificaciones en la normativa actual para reflejar las particularidades de esta actividad.
El desafío ahora es garantizar el posicionamiento competitivo de los puertos españoles en el bunkering mediante una modificación del Texto Refundido de la Ley de Puertos del Estado y los pliegos de prescripciones particulares para poder facilitar este servicio portuario de una manera adecuada.