La empresa dedicada al transporte por carretera de mercancía no perecedera entre Europa y Marruecos, GLT, ha implantado en sus vehículos un sistema propio de geolocalización que ayuda a la entrega de la mercancía en los plazos establecidos.
El nuevo sistema combina la coordinación de la tecnología de localización GPS, y de telecomunicación GPRS, con un sistema de control y seguimiento de la mercancía adaptada a las necesidades de los clientes.
A través de las plataformas de comunicaciones instaladas en sus cabezas tractoras, la empresa recibe una señal GPS que determina la posición, velocidad y rumbo de los vehículos.
Esta información es transmitida por la red de telefonía móvil GSM/GPRS hasta el sistema de seguimiento, donde es procesada a través de una aplicación web de geolocalización verificada y cotejada.
El sistema embarcado permite posicionar los vehículos con un error de entre 5 y 15 metros. Dicho seguimiento facilita a la empresa su intervención rápida para reorganizar la travesía ante cualquier incidencia, para que la mercancía llegue a tiempo y en buenas condiciones. Así, el sistema ayuda a cumplir los plazos, reduciendo los retrasos en las entregas de la compañía.