Un consorcio de empresas vascas, con el apoyo del Gobierno vasco, están desarrollando un proyecto de investigación que tiene como objetivo mejorar la gestión del tráfico explotando la información que se puede obtener a través de las propias infraestructuras viarias.
El reto que persigue esta iniciativa es ofrecer al conductor información del tráfico al instante, en el mismo momento en el que se está produciendo para que pueda escoger una vía alternativa.
El proyecto S3ROAD tiene como objetivo reducir los problemas asociados a la congestión de tráfico explotando la información que puede proporcionar la propia red de carreteras y que aún no se está explotando. Con el apoyo de las nuevas tecnologías, trata de aportar el equipamiento de infraestructura y las herramientas para que las autoridades puedan obtener información detallada sobre el estado del tráfico en tiempo real, gestionarlo y posteriormente ofrecer a los conductores servicios inteligentes que se adapten a las necesidades de los distintos grupos de usuarios.
Ahorro de tiempo y de combustible
De este modo, la distribución urbana se realizará de manera más eficaz y eficiente. Así, el conductor podrá estimar el tiempo de llegada por la ruta óptima, o ser avisado de una incidencia en un punto de la carretera por la que previsiblemente va a pasar. Para las empresas, se podrán optimizar las rutas de sus flotas de vehículos en función de la densidad estimada, las condiciones atmosféricas o los cambios en la circulación debidos a obras o eventos deportivos, culturales o cualquier otra incidencia.
Respecto a las ventajas de una gestión eficaz del tráfico en tiempo real, hay que tener en cuenta que se trata de un problema creciente, que no sólo produce incomodidad a los ciudadanos, sino que supone un derroche de tiempo, combustible y que genera contaminación e inseguridad.
Tres bloques de datos
El proyecto S3Road se desarrolla en tres bloques principales. Por un lado, los nodos de infraestructura están constituidos por sensores, cámaras y dispositivos de comunicaciones que recogen datos de las carreteras en las que se instalan y también de los equipos instalados en los vehículos que circulan por ellas.
El segundo bloque de trabajo es el sistema central de control en el que se recogerán los datos de estos nodos y a los que agregarán datos de otras fuentes. Los datos servirán así como base para, posteriormente, ofrecer servicios avanzados que resulten de utilidad para las administraciones y para los ciudadanos.
El proyecto se completa con el tercer bloque de trabajo, desarrollado a partir de la información generada en el sistema central de gestión y que será el que, finalmente, permitirá ofrecer diferentes servicios inteligentes de transporte.