El tacógrafo digital, es un medio de control o un modo para mejorar la gestión de las flotas y optimizar recursos y costes económicos y medioambientales en las empresas de transportes. Esta es una de las princiales cuestiones que se planteó entre los asistentes a la interesantemesa de análisis y debate “El tacógrafo digita como sistema de gestión de una flota de transporte” que ha organizado cadenadesuministro.es en colaboración con TomTom Business Solutions en el Instituto Logístico Tajamar de Madrid.
La reunión contó con la participación de Ramón Valdivia, director general de la patronal Astic; Jesús Martínez Garvi, jefe de producto de gama pesada de Iveco España; Jesús López, director de segmento Tacógafo y servicios de Red de Continental Automotive; Carlos de la Cova, coordinador de Cargas Completas del Área Centro de DHL Freight; Miguel Ángel Sánchez, responsable de Flota Central de Tráfico de DHL Supply Chain; Tomás Pérez, director de la Delegación de Madrid de Transportes Gallestegui y, por último, Javier Cañestro, director Comercial de TomTom Business Solutions Iberia. De esta forma, el tema de debate se ha abordado desde todos los puntos de vista posibles: fabricantes de vehículos y tacógrafos, usuarios-empresa de transportes, patronal sectorial y proveedor de soluciones y gestión de flotas.
Ramón Valdivia fue el primero en abrir el debate para expresar la opinión generalizada entre el sector asociativo del transporte de que el tacógrafo digital se utiliza por las administraciones para controlar “al límite” a los transportistas con “un afán puramente impositivo y recaudatorio”. Para Valdivia, “a pesar de que se nos han impuesto con el tacógrafo una total inflexibilidad y control, no se ha logrado reducir las malas prácticas en la actividad de transporte”. Además, no perdió la oportunidad de expresar la opinión de que en el caso del transporte internacional de larga distancia la normativa de conducción y descansos y del tacógrafo digital no ha sido “positiva”, por las imposiciones muchas veces ilógicas que impone.
Una visión diferente aportó el responsable de Continental Automotive, para quien el tacógrafo digital además de regular tiene una función importantísima de igualar a las empresas de transporte para que realicen su actividad en las mismas condiciones competitivas en el mercado.
Ayuda para gestión de la profusa normativa
La importancia de los sistemas telemáticos como ayuda para gestionar la normativa del transporte y los muchos cambios que sufre es otra de los aspectos positivos del tacógrafo digital que se expuso en la mesa debate por parte de Javier Cañestro, de TomTom.
En el intercambio de impresiones, se constató también la necesidad de que las empresas de transporte se adapten a las nuevas tecnologías. Así, Jesús López reconoció que los proveedores de tecnología para este sector “tal vez no hemos sabido transmitir bien las utilidades del tacógrafo digital y la gestión que permite de las flotas para ahorrar costes”.
En este sentido, para el director comercial de TomTom llama la atención que en España con un parque de 6 millones de vehículos comerciales “sólo haya un penetración del 2,3% de sistemas telemáticosfrente al 18% en países como Reino Unido”, según los datos que aportó. Esto le lleva a afirmar que “debemos aceptar que es necesario la tecnología para ser más competitivos”.
Jesús Martínez Garví, de Iveco España, cree que el papel del fabricantes de vehículos con respecto a la tecnología que incorporan los camiones pasar por seguir innovando a la espera de que el mercado se recupere. Además, el fabricante también debe ofrecer servicios adicionales que permitan a las empresas ser más competitivas. Además, Garvi no pasa por alto que la legislación obliga a los fabricantes a invertir cada vez más en sistemas telemáticos embarcados en los vehículos y a colaborar con varios proveedores de componentes para poder ofrecer productos que proporcione cada vez más ahorros.
Ahorro y control para el cliente
El ahorro de costes e información de control que proporcionan los sistemas telemáticos a las empresas de transporte es, además, una factor que exigen los clientes, advierte Carlos de la Cova. En muchos casos, los clientes quieren saber dónde está exactamente su mercancía y los transportistas tenemos que darle una respuesta rápida y fiable. Y para ello las herramientas para la gestión de la flota son esesnciales.
Miguel Ángel Sánchez, de DHL, también profundizó en esta punto y reconoció en el debate los beneficios que aporta el tacógrafo digital a la hora de planificar y ofrecer información concreta a los clientes sobre sus cargas. “Los clientes son los que realmente nos exigen tener sistemas de gestión y nosotros tenemos que ofrecérselos para darles mayor seguridad”, aseguró.
Otro de los beneficios que aporta el tacógrafo digital es el referido a la forma de conducir de los profesionales. Así, el tacógrafo puede proporcionar ahorros de hasta el 30% al mejorar la forma de conducir de los profesionales.
Al respecto, el director comercial de Continental Automotive reiteró que el tacógrafo digital tiene la posibilidad de recoger y medir una gran cantidad de datos del camión y los conductores que aportan a la empresa una visión completa de su “rentabilidad y optimización”.
Esta visión es plenamente compartida por Tomás Pérez, de Transportes Gallestegui, pero, sin embargo, reconoció que la imposición del tacógrafo digital puede suponer en algunas ocasiones una barrera con los conductores “que tienen la sensación de que se les está controlando”.
Sin duda, la falta de financiación actual que sufren las empresas de transporte para adquirir nueva tecnología es un factor que se tiene mucho en consideración. Miguel Ángel Sánchez reconoce que su empresa tiene que ayudar a una serie de autónomos con los que trabaja a financiar la adquisición de equipos para la gestión de flotas.
A modo de resumen, durante la mesa debate quedó patente la importancia en la concienciación que debe hacerse para transmitir los beneficios de seguridad, optimización y mejor rendimiento ambiental que puede ofrecer el tacógrafo y los sistemas asociados a su gestión a los transportistas y empresas del sector.
Labor que corresponde a fabricantes de vehículos, fabricantes de sistemas y tecnología, resultando fundamental, la labor que en este ámbito se puede hacer desde las asociaciones sectoriales, para hacer ver el tacógrafo como un elemento de ayuda, gestión y optimización de la actividad más que de mero control y sanción.