El último consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Málaga, en su reunión de esta misma semana, ha dado el visto bueno a las cuentas anuales del ejercicio 2020.
Así pues, en un año marcado por la reducción de algunos de los tráficos más importantes del enclave a causa de la pandemia, el recinto malagueño ha generado unos ingresos de explotación de 15,5 millones de euros, con un resultado del ejercicio negativo de 2,8 millones de euros.
Pese a la situación, el recinto portuario ha mantenido los tráficos tradicionales de graneles líquidos y sólidos, con un movimiento total de cerca de tres millones de toneladas al cierre del ejercicio, aunque, por contra, las restricciones de la movilidad de pasajeros han repercutido negativamente en los ingresos por explotación tanto en el ámbito de cruceros, como en la conexión Málaga-Melilla, con pérdidas de 3,2 millones de euros.
En este escenario, los responsables de la rada han establecido bonificaciones por valor de cerca de un millón de euros para las empresas de la comunidad portuaria, con el objetivo aliviar las dificultades económico-financieras a las compañías que operan en el recinto portuario y sostener el tejido empresarial.
A su vez, el plan de empresa de la Autoridad Portuaria continúa con el calendario establecido, llevando a cabo proyectos que darán estabilidad y viabilidad al recinto portuario en materia de actividad logística, además de reservar espacios que permitan dar un salto cualitativo en la integración puerto-ciudad.