El Instituto Español de Oceanografía ha hecho público un estudio referente a la construcción de El Gorguel, que permitirá que el diseño de la infraestructura se realice con mayores garantías ambientales, al indicar las afecciones a evitar y permitir plantear el proyecto de forma más acertada para la protección del medio ambiente.
Encargado hace cuatro años por la Autoridad Portuaria de Cartagena para conocer las debilidades y fortalezas del ecosistema marino, este informe va a permitir plantear con las mayores garantías un proyecto en el que se adoptarán todas las medidas necesarias para no perjudicar a las reservas marinas y espacios naturales.
En total, se han contemplado seis áreas de conocimiento: hidrografía, geociencias marinas, contaminación, valoración ecológica de las praderas de Posidonia oceánica y las comunidades de macroalgas de la franja litoral, cartografía y valoración ecológica de la zona de las comunidades bentónicas de los fondos circalitorales y batial y actividad pesquera.
De esta forma, se han recabado numerosos datos para determinar el estado de conservación del ecosistema marino, como la hidrografía, la geología del fondo marino, la distribución y estado de los hábitats bentónicos, los recursos pesqueros y su exposición a la contaminación
Uno de los ámbitos en los que se va a poner especial énfasis es que el desarrollo de El Gorguel no afecte a la Red Natura 2000, adoptando las medidas necesarias para que no se produzca una pérdida neta de biodiversidad y servicios ecosistémicos.
Entre las medidas planteadas destaca la de cofinanciar, mediante una colaboración con el IEO, y universidades y organismos con competencia en la materia, la creación de un centro de acogida y tratamiento de cetáceos y tortugas. También se estudiará la financiación de proyectos de recuperación de praderas de posidonia.
El informe del IEO también indica que, en las últimas décadas, la concentración de metales en las aguas del puerto ha disminuido entre 5 y 10 veces, encontrándose ya en los niveles basales del Mediterráneo.
Por tanto, a pesar del incremento de tráfico del puerto en este tiempo, las medidas tomadas para evitar la contaminación y el esfuerzo por mantener el medio ambiente y la biodiversidad han permitido una disminución de contaminantes en el medio.