Tras un tiempo en segundo plano, las cambiantes aguas del mercado mundial de la moda vuelven a sonreir a H&M, que ha visto como el año pasado crecía un 11%, tanto en ventas como en beneficios.
Los datos indican que la compañía ha empezado a recoger los frutos que ido sembrando en los últimos años, con fuertes inversiones en su transformación digital.
De igual modo, la empresa sueca también ha invertido fuertes sumas de dinero con el objetivo de ganar eficiencia en su cadena de suministro, que engloba tanto las operaciones en tienda, como a su creciente presencia on-line en todo el mundo, a través de una gestión en pleno proceso de integración.
Fruto de todo ello es el crecimiento de su red comercial que esta año incorporará 200 nuevos establecimientos en mercados en expansión, mientras quepor contra, supondrá el cierre de otras 175 tiendas en sus mercados más consolidados, como son Europa, China y los Estados Unidos, todo con el fin de consolidar el proceso de integración.
Así mismo, las inversiones en gestión logística de H&M cubren la creación de nuevas instalaciones logísticas en todo el mundo y, con mayor volumen, una apuesta decidida por el aprovechamiento de nuevas tecnologías como la inteligencia artificial u otras herramientas analíticas avanzadas para contar con una cadena de suministro más flexible, más rápida y más eficiente, como una de sus líneas estratégicas de trabajo para este año.