Estudio 'Internet de las Cosas en Logística'se puede descargar en este enlace (disponible en formato pdf, en inglés, de 29 páginas, 9,2 Mb).
DHL conjuntamente con la empresa de tecnologías de información Cisco han elaborado conjuntamente un nuevo informe sobre el impacto que el 'Internet de la Cosas' (IoT) tiene y tendrá en la industria logística.
Durante la presentación del estudio en Dubai, desde el operador han recordado que, como muestra el Indice de Conectividad Global 2014, esta sigue siendo muy limitada en términos generales.
Por ello, actualmente, los países pueden aumentar mucho más su conectividad y prosperar a través de la integración del comercio y la tecnología. En este contexto, el Internet de las Cosas facilitará enormemente esta transformación global.
Triplicar en solo cinco años
Según recoge el informe, habrá 50.000 millones de dispositivos conectados a Internet en el año 2020, lo que supondrá triplicar en solo cinco años el número actual de 15.000 millones e incidirá directamente en todo tipo de negocios.
Así, la combinación de mayores ingresos y menores costes acorde al crecimiento del comercio electrónico, conlleva un gran abanico de oportunidades para operaciones logísticas como el almacenamiento, el transporte de carga y otros eslabones de la cadena de suministro, dada la necesidad de incrementar las mismas para satisfacer a los clientes.
Para cualquier organización, el Internet de las Cosas tendrá consecuencias que cambiarán su cadena logística y el estado actual del sector, desde la creación de más opciones de entrega de 'última milla' para los clientes, hasta una mayor eficiencia de las operaciones de almacenamiento y transporte de mercancías.
Mejora de la cadena de suministro
El informe señala que el IoT generará, solo en el apartado logístico, un negocio por valor de 2.100 millones de dólares en la próxima década, y que esta industria podría alcanzar los niveles más altos de eficiencia.
Esto se logrará mediante la optimización de las operaciones de seguimiento de envíos y otros eslabones de la cadena logística, como ya demuestra el control de flotas en el transporte por carretera, un apartado que mejorará aún más durante los próximos años con un seguimiento y localización de mercancías más rápido, preciso, predecible y seguro.
Por otro lado, es indudable el papel que Internet tiene para la conexión entre operador y cliente en el servicio de envío y el reparto de última milla, actuaciones que se están personalizando cada vez más con ofertas como las ventanas horarias o la posibilidad de cambiar el destino una vez enviado el producto.
Además de la elaboración de este informe, ambas empresas también colaboran actualmente en un proyecto conjunto para mejorar la toma de decisiones, con el uso de esta tecnología, en la operaciones de almacén a través de análisis de datos casi en tiempo real con dispositivos conectados vía Wi-Fi.