Medidas en materia de infraestructuras y servicios ferroviariospuede descargarse en este enlace el documento del ministerio de Fomento (disponible en formato pdf , de 21 páginas, 360 Kb).
A partir del 31 de julio del próximo año 2013 los usuarios del transporte ferroviario podrán optar por Renfe o por otro operador para realizar sus desplazamientos, tanto en servicios que discurran sobre la red de Alta Velocidad como para los de red de ancho ibérico convencional y métrico. Así lo ha decidido el Gobierno tras autorizar en el último Consejo de Ministros del viernes 20 el Real Decreto Ley por el que se adoptan una serie de medidas para liberalizar el transporte ferroviario nacional de viajeros.
En concreto, se establece un calendario en virtud del cual se fija la apertura del mercado de tráfico de viajeros nacional por ferrocarril a partir de esa fecha, un año y medio antes de lo previsto. Con esta medida el Grupo Fomento “inicia un proceso de racionalización y eficacia del sector ferroviario con el objetivo fundamental de ofrecer un mejor servicio a los 500 millones de viajeros anuales; mejores precios, por la entrada de competencia, y una mayor y más eficiente oferta de movilidad”, señala en el ministerio en un comunicado.
En definitiva, no se trata sino del adelanto en 18 meses con respecto al plazo dado por Bruselas para liberalizar el transporte ferroviario de viajeros. Algo que ya se abordó con el transporte de mercancías en noviembre de 2003, si bien no fué hasta 2006 que la primera operadora privada ultimó todos los trámites y estuvo en posición de poder operar trenes. Un proceso que, a día de hoy, no ha dado los frutos deseados, a tenor de la exigua cuota del 3% que detenta el ferrocarril como medio de transporte de mercancías en nuestro país.
División de Renfe Operadora en cuatro filiales
Para prepararse de cara a la liberalización del mercado, el Real Decreto Ley establece que Renfe quedará estructurada en cuatro sociedades, cuyo objeto social incluirá las funciones y obligaciones de la unidad de negocio de viajeros; de la unidad de negocio de mercancías y logística; de la unidad de negocio de fabricación y mantenimiento; y de realización de operaciones de arrendamiento y otras vinculadas al activo ferroviario.
La oportunidad de constituir estas sociedades viene determinada por el diferente tratamiento que requiere cada área. Esta estructura, que mantiene la coherencia de las áreas de negocio de la empresa, permite una adaptación más flexible a las nuevas condiciones. Las sociedades estarán participadas al 100% por Renfe Operadora.
El Decreto establece también la integración con fecha 1 de enero de 2013, del operador de vía estrecha Feve en Renfe y Adif, en el marco del Plan de Reestructuración y Racionalización del Sector Público Empresarial y Fundacional Estatal, del 17 de marzo de 2012. De este modo, se segrega la parte de infraestructuras, que pasa a Adif, de la parte de operación, que pasa a Renfe, para ganar en “eficiencia, racionalidad y economías de escala”, indica Fomento.
El Gobierno también definirá qué servicios de media distancia someterá a Obligación de Servicio Público (OSP) atendiendo a criterios de eficiencia económica, medioambiental y social y, por último, Fomento elevará al Consejo de Ministros una propuesta de reestructuración de infraestructuras y servicios ferroviarios.
Presiones del lobby ferroviario
Con la decisión del Gobierno de adelantar la liberalización del transporte ferroviario de pasajeros se abre el camino a que muchas empresas interesadas en este modo de transporte puedan comenzar a planificar sus inversiones. De hecho, en los últimos tiempos algunas voces del lobby ferroviario se quejaban de que la indecisión del Gobierno en este campo “impedía desarrollar ningún tipo de negocio en el campo ferroviario porque estamos saturados de informaciones contradictorias”.
Muchas son las entidades interesadas en la liberalización o, incluso, privatización del transporte de viajeros por ferrocarril, como Acciona, Ferrovial, ACS, FCC, Alsa, Veolia, OHL, Comsa, Avanza, sin olvidar a los operadores alemán (Deutsche Bahn) y galo (SNCF).
A pesar de que la ministra Ana Pastor aseguraba a finales de junio a los líderes de CCOO y UGT que el Gobierno respetaría las pautas de Bruselas para abrir este sector y que se acompasaría su ritmo al que marca la Comisión Europea, que obliga a liberalizar este tipo de transporte a más tardar en 2014, finalmente las últimas medidas de recorte presupuestaria adoptadas por el Gobierno ha impuesto el adelanto de la liberalización en el sector ferroviario de pasajeros.
ALSA, bien posicionada
A pesar de las críticas vertidas por parte de las empresas del lobby ferroviario, algunas empresas si decidieron hace algún tiempo ir avanzando gestiones y trámites ante un posible adelanto de la liberalización ferroviaria en el sector de pasajeros. Este es el caso de la compañía Alsa, una de los referentes españoles en transporte de viajeros por autocar.
La compañía creo la filial Alsa Ferrocarril, S.A.U y obtuvo la licencia de empresa ferroviaria el 29 de marzo de 2010. Además, también cuenta con el certificado de seguridad, lo que le permite realizar ya transporte ferroviario de mercancías. De esta forma, a falta de concretarse los requerimientos concretos para el transporte ferroviario de pasajeros, Alsa está en una posición muy ventajosa para iniciar el transporte de pasajeros por ferrocarril a partir del próximo año frente a otros posibles competidores.