Durante la edición 2019 de LoginREAL19, el evento organizado por Cadena de Suministro que ha reunido al sector inmologístico español con sus clientes este pasado lunes en Madrid, Gabriel Córdoba, responsable de Grandes Cuentas Industrial y Logístico de BNP Paribas Real Estate, ha analizado en profundidad el impacto del comercio electrónico en el sector inmologístico, así como las nuevas tendencias que se abren en este ámbito.
Pese a que, según Córdoba, el e-commerce representa solo un 6,5% de las ventas del comercio minorista en España, sin embargo, también existen una serie de factores que avanzan que su presencia tiene todos los visos de seguir creciendo, como, por ejemplo, el hecho de que muchos de los principales actores del retail que todavía no están posicionados en este canal.
De hecho, según el experto de BNP Paribas Real Estate, una parte importante de las empresas de retail están duplicando sus almacenes, distinguiendo los de suministro a sus tiendas con respecto a los que desarrollan el e-commerce, lo que se traduce en una necesidad de más metros cuadrados de almacenamiento.
El comercio electrónico necesita naves modernas
De igual modo, en opinión de Córdoba, el crecimiento del e-commerce lleva asociado el crecimiento y la modernización del sector logístico, merced, sobre todo, a la irrupción de empresas de venta on-line.
Así mismo, muchos fabricantes que utilizan plataformas de venta on-line también tienen la necesidad de contar con almacenes para suministrar sus ventas, directamente o por medio de operadores, lo que implica un creciente necesidad de nuevos proyectos en zonas de última milla para la distribución urbana.
En este contexto, el responsable de Grandes Cuentas Industrial y Logístico de BNP Paribas Real Estate defiende que no existe un parámetro claro de ubicación para estos nuevos desarrollos y que la mayoría de operadores sigue utilizando naves logísticas convencionales, aunque, en todo caso, la adaptación que realiza cada operador a su forma de afrontar el e-commerce es distinta y depende mucho del producto que vaya a manipular.
Así mismo, en opinión de Córdoba, la necesidad en la operativa de estas naves de más mano de obra genera el desarrollo de naves que incorporan más servicios y un mejor acondicionamiento de los espacios de trabajo.
En medio de este panorama, además, se está produciendo un profundo cambio en la gestión de la cadena de suministro que pasa de ser una simple suma de eslabones a convertirse en un ecosistema complejo.
El impacto del cambio en la gestión de la cadena de suministro
Para dar servicio a las nuevas necesidades que genera el consumo y actividad logística en proceso de transformación surgen nuevas naves para la distribución de última milla dedicadas, entre otras actividades, a la distribución de e-commerce, a servir como almacenes de distribución de grandes retailers por medio de empresas logísticas especializadas en reparto urbano, a convertirse en servicios de la ciudad y a los ciudadanos, como puntos de recogida de artículos de compra on-line, por ejemplo, además de centros para gestionar la logística inversa, como puntos de devolución de artículos y de gestión de devoluciones.
Estos nuevos desarrollos tienen, a juicio del experto de BNP Paribas Real Estate, una serie de características, como, por ejemplo, que son almacenes con un mayor ratio de muelles de furgonetas frente a vehículos pesados, con alturas máximas de almacenamiento marcadas por la normativa contraincendios de un máximo de 13,70 metros, con flexibilidad para la ampliación de las oficinas, con una profundidad de las naves de entre 60 y 80 metros, con un amplio porcentaje de suelo dedicado a oficinas y con playas de maniobra interiores para evitar efectos sobre la trama urbana.
De igual modo, esta nueva tipología de hubs urbanos tiene que contar con accesos rápidos a la ciudad y diferentes rutas alternativas, así como con una buena conexión con las grandes plataformas logísticas de distribución nacional o regional, con el fin de convertirse en puntos que permitan una reducción efectiva de los tiempos de reparto, con un ojo puesto en la sostenibilidad, ubicados dentro de las tramas urbanas, preferentemente en zonas con una alta concentración de habitantes y accesibles a través del transporte publico.