La ampliación del Canal de Panamá, que se inaugurará el próximo 26 de junio tras ocho años de obras, espera duplicar en dos décadas los tráficos que atraviesan actualmente la instalación. A día de hoy, el Canal recibe cerca de 340 millones de toneladas a bordo de las naves, pero desde la Autoridad Portuaria del Canal esperan que gracias a la ampliación esta cifra supere los 600 millones, en un plazo de entre 10 y 20 años.
La ampliación del Canal de Panamá consiste en un nuevo juego de esclusas compuestas por compuertas rodantes, un total de ocho en cada costa, y por tinas de reutilización de agua que funcionan con un sistema de llenado y vaciado de agua lateral.
La puesta en servicio de las nuevas esclusas permitirá que crucen el Canal buques con una capacidad de carga tres veces superior a los actuales, esto es, capaces de portar unos 13.000 contenedores.
Según la Autoridad Portuaria del Canal de Panamá, esto supondrá un incremento del tráfico proveniente de Asia, un mercado que en las últimas tres décadas ha generado grandes flujos de transporte hacia América del Norte, dado que el aumento de la instalación permitirá que los buques provenientes del Pacífico, cuyas dimensiones triplican a los del Atlántico, puedan realizar sus operaciones en el Canal sin realizar un transbordo de mercancías.
Actualmente, en las entradas de la ruta llegan los Post-Panamax, unos buques con capacidad para transportar 13.500 TEUs y dimensiones cercanas a los 400 metros de eslora y 16 de calado, lo que les impide hacer la travesía y les obliga a trasbordar las mercancías a ferrocarriles o embarcaciones de menor tamaño.
La ampliación del Canal pretende solucionar estos problemas, lo que repecurtiría en un aumento en el número de megabuques que llegan a la instalación. En este sentido, terminales como Manzanillo International Termional, en cuyos muelles atracan los Post-Panamax, o PSA Terminal ya se están preparando para el crecimiento previsto de la demanda.
Aparte de esperarse un aumento en el número de megabuques que llegarán a la instalación, se prevé que el tránsito de buques-cisterna con gas natural licuado experimente un crecimiento. Así, a partir de 2017 la Autoridad Portuaria del Canal aportará al presupuesto estatal 380 millones de dólares, 337 más que en 2015.
Como consecuencia del tráfico de estos buques-cisterna, se espera que la logística del Canal también experimente un crecimiento, con la construcción de una terminal de combustible y de generación de energía. En este sentido, el objetivo de la Autoridad Portuaria del Canal es que la planta se convierta en un centro de difusión de este tipo de combustibleen el Pacífico y para los países de América Central.
Asimismo, también se espera que las actividades comerciales de Panamá también registren un crecimiento.