Tradicionalmente, los países europeos constituyen el principal mercado para las exportaciones españolas y, de igual modo, también suponen el principal punto de abastecimiento para el país.
Así pues, el año pasado 246 millones de toneladas de mercancías salieron o entraron a través de los puertos españolas con destino u origen en otros países del Viejo Continente, cifra que supone casi un 44% del total de 563 millones de toneladas a que ascendió el tráfico portuario en España en 2018.
En este sentido, en el último año Puertos del Estado ha detectado que los enclaves portuarios españoles reciben cada vez más encargos para el transporte de cargas de proyecto, en las que se manipulan mercancías de dimensiones fuera de los tamaños y pesos habituales que forman parte de grandes estructuras que deben ser manejadas en amplios espacios, con grúas especiales y personal altamente cualificado.
Además, en estos casos, los propios puertos se encargan de organizar y coordinar todos los transportes que participan en la cadena logística de este tipo de mercancías, cuyos tráficos busca consolidar, así como intentar captar otros nuevos, en particular en tránsito y ro-ro, en la feria BreakBulk que se celebra en Bremen entre el 21 y el 23 de este mismo mes de mayo.