El operador danés DSV ha conseguido la aprobación de los accionistas de UTi y de las autoridades de defensa de la competencia, por la que el grupo estadounidense pasa a formar parte de DSV por un precio de 1.190 millones de euros. El acuerdo entre ambas partes para la compra ya se había alcanzado el pasado octubre, aunque no se ha hecho efectivo hasta ahora.
Gracias a esta transacción, DSV se ha convertido en el cuarto mayor transitario del mundo, y cuenta con presencia en 84 países, 848 oficinas y 339 instalaciones operativas, además de una plantilla total de 44.000 empleados.
Desde la empresa afirman que la operación ha fortalecido su posición en el mercado internacional, dentro su división de Air&Sea, convirtiéndose en el sexto y séptimo mayor operador dentro del transporte marítimo y aéreo, respectivamente.
La división Air & Sea será la más beneficiada, ya que ahora podrán entrar en mercados verticales que UTi tenía consolidados.
En el caso de la división de transporte, la transacción respaldará su crecimiento en el mercado español, en particular dentro del negocio internacional de cargas completas y de distribución nacional en España. Además, gracias a la transacción el operador danés podrá alcanzar el volumen de negocio deseado en el mercado español.
Pese a todo, los analistas advierten del reto que la operación supone para DSV, teniendo en cuenta la caída del 16,5% experimentada en los ingresos de UTi durante el segundo trimestre.