La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha anunciado esta semana una sanción de 80.001 euros a Unipost por no entregar los envíos a sus clientes.
La multa, que tiene su origen en una denuncia anónima, obedece a que Unipost acumuló en sus instalaciones, según ha acreditado Competencia, "3,4 millones de envíos sin entregar de dos de sus clientes, correspondientes a remesas de los años 2016 y 2017".
La empresa, actualmente en liquidación, notificó los hechos en abril de 2018 a los clientes afectados, a los que pidió en su momento que fueran a recoger los envíos sin entregar en su delegación.
Esta resolución pone fin a la vía administrativa, aunque el operador postal privado puede interponer contra ella recurso contencioso-administrativo ante la Audiencia Nacional, en el plazo de dos meses.
Esta sanción pone el contrapunto a la demanda civil que Unipost tiene previsto interponer contra Correos, a la que reclamará, como ha indicado su administrador concursal y fue autorizado judicialmente en noviembre, 100 millones de euros por “infringir la normativa de competencia en el sector postal”, en un movimiento pensado para aumentar los fondos a repartir en la fase de liquidación entre los acreedores y aportar nuevas circunstancias que ayuden a esclarecer la calificación del concurso.