¿Cómo obtener el máximo rendimiento del tacógrafo digital para adaptarse a las nuevas normativas?

Como herramienta de recogida de información legal, cuantos más datos recoja menor será la inversión adicional, por lo que es importante tener las últimas versiones.

21/02/2022 a las 13:14 h
Últimas semanas antes del cambio obligatorio del tacógrafo en transporte internacional

La segunda generación del tacógrafo inteligente, que verá la luz en 2023, debe su existencia en gran medida al ya conocido paquete de movilidad. Tras años de negociaciones, el Parlamento Europeo implantó esta reforma que hace especial hincapié en la competencia leal y en la protección de los derechos de los conductores mediante la mejora de las normas de cabotaje y desplazamiento.

Para garantizar su cumplimiento, la Unión Europea recurre a tacógrafos inteligentes de segunda generación, que recopilan datos fiables sobre las posiciones de los vehículos, los tiempos de conducción y las operaciones de cabotaje.

Para obtener el máximo rendimiento de estos dispositivos, es importante una exhaustiva formación en su funcionamiento. Es por ello que Continental se ha comprometido a ayudar a los gestores de flotas para convertir la obligatoriedad de uso en una ventaja competitiva.

Para el transporte internacional es obligatorio estar equipado con un tacógrafo inteligente. Como herramienta de recogida de información legal, cuantos más datos recoja menor será la inversión adicional, por lo que es importante tener las últimas versiones instaladas y conocer los principales cambios legislativos.

El objetivo es ofrecer servicios y herramientas que automaticen todos los procesos y saquen el máximo partido a la información del tacógrafo, lo que permitirá anticiparse a los problemas, evitar infracciones y ser más eficientes.

Evitar errores y sanciones

El tacógrafo de segunda generación va a facilitar muchos trámites al conductor, como la justificación de paso por frontera o las actividades de cabotaje, evitando errores y sus consecuentes sanciones.

En lo que se refiere al cabotaje, los conductores deben introducir todas las operaciones en sus tacógrafos, de forma que se generen datos de seguimiento y evitar así el cabotaje sistemático.

Por otro lado, dado que los conductores deberán volver cada tres o cuatro semanas a su país de origen y los vehículos de transporte internacional tendrán que estar cada ocho semanas en el país de matriculación, el proceso debe quedar documentado y conservado por si es solicitado en una inspección a la empresa.

Asimismo, el software legal del tacógrafo permitirá a los gestores analizar las posibles infracciones del Registro Europeo de Empresas de Transporte de un solo vistazo, al igual que la gestión de paso por frontera de sus conductores.