A mediados de este mes de enero ha dado comienzo oficialmente el proceso de construcción del primer buque ro-ro a vela que forma parte del proyecto piloto Neoliner, que financia un consorcio público-privado del que forma parte CMA-CGM en las instalaciones del astillero turco RMK Marine.
La embarcación tiene 136 metros de eslora y equipa unos mástiles abatibles de 76 metros de altura, los primeros de este tipo en el mundo, sobre los que puede desplegar un velamen de 3.000 m², que actuará como principal fuente impulsora del barco, aunque también equipará un motor diésel auxiliar para maniobras portuarias y servicios puntuales.
Así mismo, el buque tendrá capacidad para transportar hasta 1.200 metros lineales de carga o 265 TEUs, con una máxima de 5.300 toneladas. De igual manera se prevé que pueda acomodar a doce pasajeros en seis camarotes dobles, así como a una tripulación compuesta por trece integrantes.
Este proyecto cuenta con un presupuesto de más de sesenta millones de euros, para una iniciativa que pretende ofrecer una solución asequible y eficiente para descarbonizar los servicios transatlánticos de transporte marítimo.