La Generalitat de Cataluña ha reclamado a la DGT que incremente la actual plantilla existente en la región de examinadores especializados en la obtención del permiso de conducir vehículos pesados.
Así mismo, las autoridades catalanas estiman, a partir de datos de las federaciones de autoescuelas, que, en estos momentos, en Cataluña hay más de 5.000 candidatos que están esperando para realizar las pruebas prácticas para la obtención de este carnet.
La Generalitat catalana inserta esta reclamación entre las diez propuestas para reducir los accidentes con camiones implicados en la AP-7.
De acuerdo con sus registros estadísticos, esta autopista ha incorporado de media 12.000 vehículos totales más y otros 3.700 vehículos pesados, con puntas en el tramo entre Martorell y Vilafranca del Penedès de 25.000 vehículos y 7.600 vehículos pesados de media.
En este sentido, los responsables autonómicos de tráfico relacionan este incremento de movilidad con un incremento de siniestralidad, ya que, según sus datos, en 2022 ha habido 341 accidentes con vehículos pesados implicados, lo que representa un 30% más de accidentes con vehículos pesados implicados que en 2019 antes de la liberación de peajes.
Sin embargo, en los ocho primeros meses de 2023 los accidentes con vehículos pesados con víctimas se han reducido en un 16%con respecto al año pasado.
Además, para reducir la siniestralidad de los vehículos pesados, las autoridades catalanas también se han propuesto mantener los controles masivos de camiones en la AP-7, especialmente en aspectos relacionados con el peso y el uso del tacógrafo, aumentar el número de controles técnicos en carretera en la región, incrementar los controles en empresas con varias sanciones y poner en marcha una mesa para el transporte de mercancías.