La Generalitat de Cataluña va a poner en el mercado unas 835 hectáreas de suelo industrial en la Plana de l'Alt Camp, en Tarragona. Así se recoge en el Plan Director Urbanístico de Actividad Económica de este ámbito territorial, que abarca un ámbito de 3.700 hectáreas en total.
Esto se suma a las 420 hectáreas de nuevo suelo industrial que desarrollará junto al Incasol en Lérida, con una inversión prevista de 230 millones. Por tanto, entre ambos proyectos suman 1.255 hectáreas brutas de nuevo suelo industrial y se prevé llegar a las 2.005 a lo largo de la legislatura.
En este sentido, desde la administración autonómica recuerdan que en Cataluña existen 2.915 hectáreas en polígonos industriales y solamente se ha desarrollado un 21% de todo lo previsto en los planes municipales.
En este caso, las 835 hectáreas se repartirán entre el entorno de la plataforma intermodal Valls-est, en el polígono industrial de Valls, al oeste de los polígonos industriales de Les Planes de la Serra y Bràfim/Alió, y en el ámbito del Pla de Santa María.
Para cada uno de estos tres ámbitos se proponen diversas alternativas de ordenación concreta, que contemplan la obtención de parcelas de grandes dimensiones, de hasta 100 hectáreas, compatibles con una posible nueva terminal ferroviaria y el mantenimiento de la conectividad. A lo largo de la redacción del Plan Director Urbanístico, se escogerá la mejor alternativa para cada zona.
Por otro lado, conviene apuntar que el Incasol está trabajando en las ampliaciones de los polígonos de Valls y Constantí. En el primer caso, se ampliará en más de un 17% y en el segundo, se está estudiando el desarrollo de 66 hectáreas de suelo bruto de las que dispone en el municipio.