Para la mayoría de personas, un vehículo a motor es un medio de transporte. Pero para algunas es, además, una forma de ganarse la vida y esto se nota en las coberturas que contratan al suscribir una póliza. Los vehículos que se emplean preferentemente con fines profesionales tienden a contar con la cobertura de la retirada de carnet más a menudo que aquellos de uso privado, como demuestran los datos reunidos en la 'Memoria social del seguro 2014' publicada por UNESPA.
El capítulo dedicado al seguro del automóvil muestra cómo camiones, furgonetas y sccooters están entre los vehículos que suelen disponer de la cobertura de pérdida de la licencia de conducir. O lo que es lo mismo, los camioneros, los repartidores y los mensajeros son la gente más proclive a protegerse ante dicha eventualidad.
La cobertura de la retirada del carnet de conducir puede conllevar prestaciones diversas. El servicio más frecuentemente contemplado es que la aseguradora sufrague el curso formativo para que el infractor pueda recuperar los puntos perdidos del carnet.
Otra prestación que puede llegar a contemplar el seguro es la entrega de dinero por parte de la entidad para atender los gastos de desplazamiento en los que incurre el conductor al dejar de moverse de un lugar a otro en su vehículo. Es decir, la aseguradora realiza un desembolso que ayuda a pagar los billetes de autobús y metro, tomar un taxi o alquilar una bicicleta.
Pero la prestación que hace que la cobertura de retirada de carnet sea especialmente popular entre los conductores profesionales es que la póliza otorga al conductor que ha perdido el carnet el derecho a un subsidio cuando este hecho le impide ejercer su profesión. Este último servicio está pensado, en esencia, para los trabajadores autónomos.
Un 43% de los camiones
Los datos de la Memoria socialmuestran cómo el 50% de los scooters, el vehículo por antonomasia de los mensajeros, dispone de protección frente a la retirada del carnet. Le siguen, en importancia, los camiones, con un 43%; y las furgonetas, con otro 34%, mientras que la tasa de contratación de esta cobertura entre los conductores de turismos es del 32%.
La presencia de la protección frente a la retirada de carnet es mínima entre las pólizas que cubren la maquinaria agrícola, los vehículos industriales, los remolques y los autobuses. El cuadro lo completan los ciclomotores (9%) y las motocicletas (18%).
A cierre de 2013, año de referencia del estudio, contaban con cobertura frente a la retirada de carnet 8,5 millones de conductores. Es decir, un 29% de los casi 29 millones de asegurados. En 2013, fueron indemnizadas 2.767 personas por la pérdida de la licencia.
El permiso de conducción por puntos entró en vigor en julio de 2006. En estos nueve años, según indica la Dirección General de Tráfico (DGT), han sido denunciados siete millones de conductores. De estos, 203.283 han llegado a agotar su saldo de puntos y han dejado de tener el carnet.
Todo conductor que pierde su permiso no puede conducir durante medio año. Este periodo se reduce a tres meses para los conductores profesionales. Para recuperar la licencia es necesario, además, realizar un curso de seguridad vial de 24 horas lectivas de duración en un centro especializado. Conducir sin permiso está tipificado como delito por el artículo 384 del Código Penal.