Las empresas han intensificado en los últimos años su inversión en soluciones de automatización para impulsar almacenes flexibles y modulares que puedan hacer frente a la volatilidad del mercado.
En un entorno global afectado por la incertidumbre geopolítica y económica, este tipo de sistemas permiten a las organizaciones asegurar una operativa ágil y eficiente, que pueda adaptarse mejora las fluctuaciones del mercado y a las demandas cambiantes de los consumidores.
Es una de las principales conclusiones del documento 'Inteligencia artificial, clave para aprovechar el potencial del almacén', elaborado por Element Logic y disponible de forma gratuita, que señala que la automatización se ha convertido en un mecanismo de protección para garantizar el futuro de las empresas en cualquier escenario.
La inversión en automatización permite a las empresas mantener su competitividad después de una pandemia que tensionó al máximo las operativas de almacén. En consecuencia, numerosas empresas han centrado sus esfuerzos en mejorar su eficiencia y reducir la dependencia de los procesos manuales.
En el estudio, la colaboración entre humanos y robots se presenta como un factor clave para aportar valor añadido al trabajo de los operarios de almacén y frenar la elevada rotación en el sector intralogístico.
En este sentido, aunque la automatización de almacenes muestra una clara tendencia al alza, todavía está en una etapa incipiente, lo que convierte a la retención del personal en un gran desafío para el sector, especialmente en almacenes que operan de forma manual, y en posiciones con tareas repetitivas que no ofrecen oportunidades de crecimiento.
Por su parte, la preparación de pedidos es el proceso que más se automatizaen los almacenes. En este sentido, desde Element Logic, consideran que automatizar las tareas más repetitivas permite liberar recursos, desarrollar nuevas funciones y capacidades, lograr un entorno de trabajo más saludable y combatir la rotación laboral.