El pleno del Parlamento Europeo ha dado el visto bueno a la nueva legislación paar las condiciones laborales de los trabajadores de plataformas digitales con 554 votos a favor, 56 en contra y 24 abstenciones.
El objetivo de esta norma es garantizar que la situación laboral de los trabajadores de plataformas sea categorizada correctamente y poner fin al abuso de los falsos autónomos.
De igual manera, con el prouecto también seregulan, por primera vez en la unión, el uso de algoritmos en el entorno laboral.
Por otra parte, en relación con el estatus laboral de los repartidores, la norma introduce una presunción de relación laboral que se activa cuando hay hechos que indican la existencia de un control y una dirección sobre el trabajador, de conformidad con la legislación nacional y los convenios colectivos, y teniendo en cuenta la jurisprudencia de la UE.
En este sentido, la Directiva obliga a los países de la UE a establecer una presunción jurídica refutable de empleo a nivel nacional, con el fin de corregir el desequilibrio de poder entre la plataforma laboral digital y la persona que realiza el trabajo en plataformas, de tal modo que la carga de la prueba recae en la plataforma, lo que significa que depende de la plataforma demostrar que no hay relación laboral.
Por lo que respecta a la gestión de los algoritmos, el proyecto quiere garantizar que una persona que realiza trabajos en plataformas no pueda ser despedida sobre la base de una decisión adoptada por un algoritmo o un sistema automatizado de toma de decisiones.
De igual manera, las plataformas digitales deben garantizar la supervisión humana de las decisiones importantes que afectan directamente a sus trabajadores y, al mismo tiempo, se incorporan aspectos destinados a proteger de manera más robusta los datos de los trabajadores, incñuyendo la prohibición de tratar ciertos tipos de datos personales, como los relativos al estado emocional o psicológico y a las creencias personales.
El Parlamento estima que la norma afectará a hasta cuarenta millones de trabajadores que desarrollan su labor en más de quinientas plataformas en la Unión.
Ahora, tras su aprobación en la Eurocámara, el texto debe ahora ser adoptado formalmente por el Consejo de tal modo que, tras su publicación oficial, los Estados miembros dispondrán de dos años para incorporar las disposiciones de la Directiva en sus legislaciones nacionales.