Los ingresos de los operadores postales de todo el mundo se han incrementado en un 2,1% el pasado 2023, según los datos de un reciente estudio llevado a cabo por la International Post Corporation.
La entidad estima que el sector postal mundial parece haber superado los efectos de la pandemia y repunta pese al mal contexto económico generalizado que se registró el año pasado.
Precisamente la incertidumbre econóimica internacional se refleja en los costes y los ingresos de los operadores postales de todo el planeta, con volúmenes de correo y márgenes de ganancias reducidos en algunas áreas.
Así pues, las actividades logísticas y de paquetería se perfilan como la principal fuente de crecimiento del sector postal, mientras que el correo postal tradicional sigue disminuyendo, toda vez que el crecimiento del comercio electrónico sigue impulsando los volúmenes de paquetes, aunque a menor ritmo que durante la crisis sanitaria.
Al tiempo, las nuevas tecnologías constituyen, según el análisis de IPC, un auténtico rejón de muerte para los envíos postales, con lo que los operadores viven un acelerado proceso de transformación para diversificar sus actividades, en una apuesta decidida por desplegar entregas rápidas y eficientes en servicios de reparto de última milla.
De igual manera, también se observa en el sector una decidida apuesta por las nuevas tecnologías, especialmente de automatización, inteligencia artificial y análisis de datos para optimizar los procesos de clasificación y entrega.
Además, los operadores postales también impulsan iniciativas de colaboración para agilizar los procesos aduaneros y los envíos transfronterizos.