Los principales indicadores de la industria española se han vuelto a contraer en enero, con retrocesos menores que en meses anteriores tanto en la producción, como en los nuevos pedidos, el empleo y los nieveles de existencias.
Al tiempo, en un contexto global de debilidad de la demanda, los precios han seguido bajando, con un deterioro paralelo en el funcionamiento de las cadenas de suministro como consecuencia de la crisis en el mar Rojo y los retrasos que se están produciendo en los servicios de transporte marítimo que evitan la zona.
En este sentido, los plazos medios de abastecimiento han vuelto a crecer por séptimo mes consecutivo, como consecuencia de la situación que vive el tráfico mercante internacional.
Así pues, el PMI del primer mes de 2024 se coloca con un índice de 49,2 puntos, ligeramente por encima de los 46,2 puntos de diciembre.
De manera particular, durante el mes han disminuido levemente la producción y las entradas de pedidos, incluidos los de exportación.
Además, la incertidumbre económica también ha provocado que las industrias hayan recortado también las compras para adaptarse a una demanda débil, así como el empleo, que también ha caído por quinto mes consecutivo.
En lo que respecta a los precios, en enero se registraron nuevas caídas en los precios de la producción y del abastecimiento. En el primer caso, estos descensos se acumulan desde abril del año pasado, mientras que para el segundo la tendencia bajista se mantiene en los últimos once meses.