Aecoc ha celebrado en Madrid su Congreso de 'Smart Distribution', que ha reunido a los máximos responsables de la distribución urbana de mercancías y las Administraciones estatales, autonómicas y locales. Como ha explicado su director general, José María Bonmatí, el 66% de la población española habitará en grandes núcleos urbanos en 2050, lo que incrementará la demanda de bienes y suministros.
A ello se añade que el e-commerce genera ya un total de cuatro millones de entregas diarias en España, donde existen alrededor de dos millones de vehículos que se dedican a la distribución urbana de mercancías. En Madrid, pueden suponer entre un 30% y un 40% del tráfico rodado diario.
"Esta situación está provocando una reconfiguración de las ciudades, que deben plantearse cómo racionalizar el uso de un espacio público cada vez más limitado, el tráfico generado en la ciudad y las emisiones contaminantes que se producen; cubriendo las necesidades crecientes de suministro de sus ciudadanos y su bienestar", ha explicado Bonmatí.
Para ordenar esta nueva realidad, España cuenta con la Ley de Cambio Climático y la futura Ley de Movilidad Sostenible. Por ello, desde la Asociación han querido hacer un llamamiento a las administraciones para que tengan en cuenta al tejido empresarial en el diseño de la estrategia de movilidad urbana.
En este contexto, Álvaro Fernández, nuevo secretario general de Movilidad Sostenible del Ministerio de Transporte, ha detallado el impacto que tendrá la Ley de Movilidad Sostenible en los procesos de distribución urbana de mercancías: “Pese a que las competencias en este ámbito son municipales, creemos que podemos ayudar planteando directrices que orienten la nueva distribución urbana y fomenten una cohesión entre los distintos Ayuntamientos”.
Por su parte, respecto al proyecto de Ley de Movilidad Sostenible, ha indicado que “En España, en los últimos 40 años no hemos tenido una Ley específica y es imposible, con todo lo que ha evolucionado este sector, que las normativas actuales nos ofrezcan amparo. Esta regulación es necesaria y así nos lo han hecho saber todos los agentes que forman parte del ecosistema de transporte”.
El caso de Nueva York
Como principal novedad, la edición de este año ha contado con la presencia de Meera Joshi, vicealcaldesa y teniente de alcalde de Operaciones de Nueva York, que ha detallado las principales políticas llevadas a cabo en materia de DUM en Manhattan, que congrega residentes, centros financieros, superficies comerciales y espacios culturales.
“El 90% de los bienes dentro de la ciudad se transportan en camión, mientras que la media americana es del 70%. Pero no solo eso, sino que calculamos que las entregas a través de este vehículo aumentarán un 68% para el 2045”, ha asegurado.
Ante esta realidad, indica Joshi, es necesario “crear una red eficiente y sostenible que dependa menos de los camiones, ya que también hemos identificado que el transporte de estos vehículos supone la segunda causa de contaminación en Nueva York”.
Aprovechando que la ciudad está rodeada por agua, se ha creado un sistema de recuperación de residuos moderno y eficiente. En 2006, la ciudad realizó una transición hacia un sistema de estaciones de transbordo marítimas y ferroviarias, y ya opera cinco ‘Marine Transfer Sites’ por donde pasan más de 27 billones de kilos de residuos que les permiten gestionar el reciclaje o la reutilización.
Asimismo, las empresas de delivery están utilizando más ‘cargo bikes’, pues en 2022 este tipo de vehículos hizo más de 130.000 viajes, entregando más de cinco millones de pedidos y reduciendo 650.000 toneladas de CO2. Con respecto a los coches eléctricos, para 2030, cada neoyorquino dispondrá de una estación de carga rápida cada 2,5 millas.