Cinco tendencias que moldearán la logística de última milla en 2025

CityLogin desvela cinco tendencias que moldearán la logística de última milla en 2025 impulsadas por procesos de largo recorrido relacionados la sostenibilidad y la digitalización.

23/12/2024 a las 10:48 h
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La digitalización o el impulso del uso de vehículos sostenibles están transformando radicalmente la distribución urbana de mercancías.

De cara a este 2025 que comienza en unos días se abren paso cinco grandes tendencias que marcarán la evolución del segmento de última milla, según el criterio de CityLogin.

En primer lugar se coloca la sostenibilidad y la descarbonización, que se erige como una prioridad urgente en el contexto de la lucha contra el cambio climático y en la mejora de la calidad del aire en el centro de grandes ciudades.

Consecuentemente, la electrificación de las flotas de vehículos o el uso de combustibles más sostenibles como el hidrógeno verde se posicionan como líneas a seguir para disminuir la contaminación generada por el sector.

En segunda posición, el nearshoring y la descentralización incidirán en la búsqueda de ubicaciones más próximas a los puntos de entrega, con el fin de reducir los costes económicos y medioambientales del transporte, algo que también implica una reducción del tráfico en las arterias principales de las ciudades, consiguiendo así entregas más ágiles.

Por otro lado, el crecimiento del comercio electrónico entre la población ha propiciado que los usuarios utilicen cada vez más las opciones de entrega extradomiciliarias, como puntos de conveniencia o los buzones inteligentes, que se convieten en alternativas que aportan muchas ventajas tanto a los usuarios como a las empresas de reparto.

Así mismo, en cuarta posición, la distribución urbana nocturna podría aliviar en gran medida la congestión de tráfico en las ciudades durante el día.

Por último, la logística predictiva se ha convertido en un pilar fundamental para todas las actividades de planificación relacionadas con la distribución urbana, de tal manera que anticiparse a los picos de demanda, planificar rutas de reparto más eficientes o proporcionar información en tiempo real son solo algunas de las acciones que pueden desarrollarse con las nuevas tecnologías y el análisis de los datos.