Una vez que el Consorcio del Centro de Transportes-Depósito Franco de Cartagena ha adjudicado a la unión temporal de empresas que componen González-Soto y Montajes Eléctricos Llamas los trabajos de urbanización de la primera fase de la ZAL de Cartagena, las obras comenzarán este verano y se prolongarán durante seis meses.
Con este trámite se da un paso más para que la ZAL de Cartagena sea una realidad y se convierta en una infraestructura estratégica para la región de Murcia.
En este sentido, las autoridades murcianas confían en la capacidad de la infraestructura para operar como factor clave de atracción de inversiones en áreas que van mucho más allá de la logística y en su poder catalizador de nuevos proyectos que aprovechen puntos fuertes como son el polo energético del Valle de Escombreras o el creciente potencial del puerto de Cartagena.
Consecuentemente, otro punto crucial para el futuro desarrollo de la ZAL de Cartagena es la conexión ferroviaria, para la que sus impulsores reclaman un impulso decidido al Gobierno central.
La primera fase de la ZAL contempla la instalación del Depósito Franco, el Centro Integral de Transporte, además de la promoción de suelo logístico para mejorar la eficiencia y la calidad de servicios que se ofrecen desde el puerto.