El sector inmologístico cerró el último trimestre de 2022 con una inversión de 277 millones, una cifra muy por debajo de la de años anteriores, según los datos que maneja CBRE.
Sin embargo, en el conjunto del año se registró la cifra más elevada de inversión de la última década, con más de 2.300 millones, un 7% más que en 2021. Los tres grandes portfolios transaccionados supusieron más del 40% de la inversión total, destacando el de Crossbay, con múltiples activos en el territorio nacional.
En 2023, será difícil de igualar los volúmenes de inversión, aunque las expectativas son buenas, gracias a la elevada demanda y la consolidación del e-commerce.
Por zonas
En la Zona Centro, en el cuarto trimestre se duplicó la superficie contratada respecto al año anterior, con 396.000 m². Durante el año, sumó 1.232.000 m², un 18,8% más que en 2021.
El dinamismo del mercado ha llevado a que la tasa de disponibilidad bajase hasta el 6,76%, frente al 7,52% de 2021. Por su parte, la última renta prime publicada ha sido de 6,25 euros/m²/mes, que representa una subida del 8,7% respecto a 2021.
En Cataluña, la cifra de contratación en el último trimestre ha sido de 230.000 m², llegando a un total de 815.000 m² en todo el año, aunque por debajo del record histórico alcanzado en 2021.
La falta de stock adecuado ha hecho que la disponibilidad registre un ligero ascenso, hasta el 3,83%, mientras que la renta prime ha sido de 7,75 euros/m²/mes, un 3% más que el cierre del año anterior.
El resto de los focos logísticos siguen atrayendo la demanda, llegando Valencia a 103.000 m² en el último trimestre, mientras Zaragoza y Sevilla han registrado récords anuales de contratación, y Málaga ha cerrado el año con más de 33.000 m², un 7% más que en 2021.
Cabe apuntar que la inestabilidad internacional ha impactado en las rentabilidades prime del sector inmologístico, que se han situado en niveles en torno al 4,75%. De cara a 2023, las previsiones apuntan a cierta estabilización entre el 5,00% y 5,20%.