En consonancia con su estrategia para reducir el impacto climático de sus camiones y atender a una amplia variedad de necesidades de transporte, Volvo Trucks ha ampliado su oferta de modelos adaptados al biodiésel B100.
El fabricante, que busca contribuir a la descarbonización sel transporte a corto plazo, cuenta con una de las gamas más amplias del sector en cuanto a opciones de combustible renovable, que incluye biodiésel, HVO y biogás.
En el caso del B100, ya está disponible para determinadas variantes de los motores diésel de 5, 8, 13 y 17 litros de los modelos Volvo FL, FE, FM, FMX, FH y FH16, si bien la disponibilidad varía según los mercados.
El biodiésel, que también se conoce como éster metílico de ácidos grasos, FAME por sus siglas en inglés, es un combustible no fósil que se obtiene a partir de aceites vegetales o productos de desecho, y es relativamente fácil de producir. Además, la certificación de un modelo para el uso con biodiésel implica automáticamente su conformidad con los requisitos de la norma Euro 6.
La reducción de CO2 del pozo a la rueda facilitada por el uso de biodiésel oscila entre el 30% y el 70% en comparación con el gasóleo tradicional, dependiendo del tipo de materia prima utilizada para producir el combustible.
A día de hoy, la gama actual de camiones medios y pesados de la marca se ofrece con cadenas cinemáticas que funcionan con diésel, biodiésel, HVO, GNC, GNL, Bio-GNC, Bio-GNL y electricidad.
El motor de combustión propulsado por combustibles renovables es uno de los tres pilares de la estrategia de descarbonización de Volvo Trucks, junto con la propulsión eléctrica mediante batería y pila de combustible. Su objetivo es lograr que todos los camiones Volvo vendidos tengan cero emisiones netas para 2040.