La Unión Europea ha establecido ambiciosos objetivos de reducción de CO2 para los vehículos pesados, con una disminución del 15% en las emisiones de los nuevos vehículos para 2025, del 45% para 2030 y del 90% para 2040, tomando como referencia los niveles de 2019/2020.
Sin embargo, Faconauto ha advertido que, al ritmo actual de electrificación del mercado, y ante la falta de infraestructura de carga y estaciones de hidrógeno para vehículos pesados, junto con el incipiente desarrollo tecnológico, el sector difícilmente cumplirá con estos objetivos.
Durante el III Observatorio del Vehículo Industrial, ha instado a la Comisión Europea a adelantar a 2025 la revisión de los objetivos de emisiones para vehículos industriales, actualmente prevista para 2027, con el objetivo de evaluar las condiciones necesarias para el cumplimiento de los objetivos y eliminar las multas para los que no consigan cumplirlos.
Asimismo, ha solicitado que se reconsideren las sanciones aplicables al sector, de las más altas para uno de los sectores que más inversión ha realizado en materia de sostenibilidad y electrificación, y se implementen los planes necesarios para acelerar el cambio hacia un modelo más viable, garantizando un enfoque justo y equilibrado para los actores implicados.
La patronal de los concesionarios cree que es clave establecer las condiciones adecuadasque permitan a los operadores de transporte invertir en vehículos de cero emisiones y operarlos de manera rentable. En este sentido, es fundamental crear un entorno favorable que impulse a los operadores a adoptar estas nuevas tecnologías sin comprometer su viabilidad económica.
Faconauto también ha defendido la importancia de una transición hacia la movilidad sostenible que integre múltiples tecnologías, no solo la electrificación, para lograr una descarbonización efectiva del transporte. Subrayan el papel clave de los combustibles renovables, que ya son una realidad y ofrecen una alternativa viable e inmediata para reducir las emisiones.
Plan de descarbonización
Para acelerar la descarbonización del transporte, considera esencial que España implemente un plan específico centrado en el apoyo directo para la renovación de flotas de vehículos pesados, con programas de ayudas que se mantengan en el tiempo, como el Moves. No obstante, subrayan la necesidad de optimizarlos, mejorando su enfoque y agilizando su implementación, con un cobro rápido de las ayudas y eliminando costes administrativos innecesarios.
El segundo eje es una fiscalidad favorable que incentive la adopción de tecnologías de cero emisiones. Finalmente, la Federación insiste en la importancia de impulsar la infraestructura de recarga y propone que España presente un plan sólido para cumplir con el reglamento europeo sobre infraestructuras para combustibles alternativos.
Todo esto también permitirá reducir la edad media del parque de vehículos industriales, que se sitúa en los 15 años. Además, el 30% de los camiones en circulación tiene más de 20 años. En cuanto a la evolución del mercado de vehículos industriales, la patronal ha anticipado que se prevé cerrar el año con 35.000 unidades, que suponen un incremento del 6% respecto al año anterior.
Este resultado positivo se debe, en parte, a la matriculación de unidades que debieron registrarse el año pasado y a la llegada de vehículos desde otros países europeos donde el mercado se ha ralentizado. Para 2025, se espera una regularización en las entregas, con una proyección de alrededor de 30.000 unidades matriculadas.
Por último, Faconauto ha resaltado un desafío adicional que enfrenta el sector: la creciente dificultad para cubrir vacantes, asegurar el relevo generacional, atraer talento femenino y joven y la necesidad urgente de mejorar la capacitación en los concesionarios de vehículos industriales, especialmente en el área de posventa.