En la actualidad, están operativos en el mundo 136 buques propulsados por GNL y se prevé un incremento del 87% para el año 2020, llegando a los 254, tal y como anticipa Gasnam, cuyas cifras superan a las que maneja Puertos del Estado, que cuantifica en 119 los buques propulsados por GNL, un dato prácticamente idéntico al de la OCDE. A ellos se sumarían otros 125 que se encuentran en la cartera de pedidos prevista hasta 2024.
España ocupa la primera posición en lo que se refiere a infraestructuras para el GNL y es uno de los principales países de del mercado del bunkering, con un tráfico de ocho millones de toneladas anuales de combustible marino movidas principalmente en Algeciras, Las Palmas y Barcelona.
A día de hoy, se están llevando a cabo nueve proyectos de construcción o transformación de buques que utilizarán motores de Gas Natural Licuado y tres gabarras que se utilizarán para operaciones de suministro.
Entre los planes de Fomento para los próximos años ocupa un lugar destacado la descarbonización del transporte marítimo, que se está viendo impulsada en gran medida por iniciativas como el Core LNGas hive, coordinado por Enagás y que cuenta con el apoyo de más de 40 socios. Su intención es asegurar un mercado marítimo del Gas Natural Licuado en España, analizando las barreras actuales desde el punto de vista de la oferta y la demanda.
74 operaciones de suministro de GNL en 2017
En 2017, los puertos españoles han acogido 74 operaciones de suministro de GNL a buques, muy por encima de las expectativas fijadas el año anterior. Además, han tenido lugar numerosos hitos, como el primer suministro desde una planta regasificadora, en el puerto de Cartagena, o el primero del sur de Europa desde una gabarra, realizado en el puerto de Bilbao.
[sumario]España ocupa la primera posición en lo que se refiere a infraestructuras para el GNL y es uno de los principales países del mercado del bunkering con un tráfico de ocho millones de toneladas anuales.[/sumario]
Existen, por tanto, diferentes soluciones para realizar este tipo de operaciones. El ‘ship to ship’ o suministro de buque a buque suele estar vinculado a las grandes terminales de importación, exportación y almacenamiento de GNL, mientras que el ‘pipeline to ship’ consiste en una estructura fija en el puerto que hace llegar el GNL a las embarcaciones a través de un gasoducto mientras está atracado en el puerto. En cuanto al ‘truck to ship’ o suministro desde el camión cisterna al buque, es el más versátil, ya que no necesita ningún tipo de instalación específica en el recinto portuario.
La estrategia que ha presentado recientemente la Organización Marítima Internacional para la reducción de emisiones en el transporte marítimo pasa por fijar un objetivo claro a corto plazo que se irá reduciendo hasta llegar a las cero emisiones en 2050. Esta situación ha dado un nuevo impulso a los puertos de todo el mundo, centrados en el desarrollo de medidas que fomenten la sostenibilidad de las actividades que tienen lugar en sus instalaciones.
Puerto a puerto
En España, son muchas las Autoridades Portuarias que están aplicando ya medidas en este sentido. Así, en el puerto de Barcelona se ha puesto en funcionamiento a finales de 2017 la primera conexión eléctrica a un buque desde el muelle mediante un motor auxiliar de gas natural, que sustituirá el funcionamiento de los motores auxiliares.
Esto permitirá reducir las emisiones de los buques atracados en el puerto durante el tiempo que pasan en las instalaciones. En concreto, se reducirán en un 80% las emisiones de NOx y se eliminarán por completo las de óxidos de azufre y las de partículas.
La iniciativa, en el marco del proyecto europeo Core LNGas hive, se suma a otros pilotos basados en el uso del gas natural en los que participa el recinto portuario, como la adaptación de dos ‘straddle carrier’ a este combustible, la introducción de una gabarra multiproducto para dar servicio en el puerto, el diseño de un remolcador a gas y la adaptación a GNL de 26 camiones.
[sumario]En 2017, los puertos españoles han acogido 74 operaciones de suministro de GNL a buques, muy por encima de las expectativas fijadas el año anterior.[/sumario]
El primero de ellos cuenta con la participación de las terminales de contenedores APM Terminals y Best, que han cedido las máquinas para la transformación de sus motores a ‘dual-fuel’ o para que puedan funcionar únicamente con gas, con la correspondiente instalación de los tanques de GNL, con una capacidad de 600 litros.
Por su parte, el proyecto de la gabarra multipropósito que Suardíaz ha encargado para ofrecer un servicio ‘ship to ship’ a Cepsa en el puerto de Barcelona, será una realidad en 2018. En total, contará con una capacidad de unos 1.200 m³ para atender la demanda prevista.
El del remolcador, en el que el puerto invertirá más de 190.000 euros, pretende estudiar el uso de este combustible en estas embarcaciones, para determinar su competitividad desde el punto de vista económico y operativo respecto a las que se están utilizando actualmente. Está previsto que esté finalizado en diciembre de 2018.