Diseñadas y desarrolladas en un primer momento para acompañar a los nuevos desarrollos portuarios, las Zonas de Actividades Logísticas se posicionan, cada vez más, como uno de los espacios más atractivos para establecer centros logísticos que poco tienen que ver con el transporte marítimo.
Ubicadas muy cerca de las grandes ciudades costeras españolas, su proximidad con los núcleos urbanos y sus excelentes conexiones, junto a la falta de superficie de la que algunas de estas ciudades adolecen para nuevos desarrollos, convierten a las ZAL en una opción más que viable para todo tipo de compañías a la hora de levantar plataformas logísticas ligadas al consumo.
En España hay, actualmente, cinco zonas de actividades logísticas operativas, en Algeciras, Barcelona, Bilbao, Motril y Sevilla.
En Algeciras, el área logística anexa al complejo portuario e industrial de la Bahía está conectada con la autovía Algeciras-Jerez; el Corredor Ferroviario Transeuropeo del Mediterráneo y los aeropuertos de Málaga, Jerez y Gibraltar. Una vez desarrolladas completamente las áreas de El Fresno, Los Barrios y San Roque, sumará una superficie de 2.876.000 m² y la mitad estará destinada a uso logístico.
Cuando finalice el proyecto de expansión que está acometiendo la Zal Port de Barcelona, por el que invertirá en los próximos cuatro años 200 millones de euros para desarrollar 450.000 m² de naves logísticas, esta área estará formada por 1.000.000 m² de naves de alta calidad dentro de la primera corona logística de Barcelona, una ciudad cuya orografía dificulta el desarrollo de nuevo suelo.
La ZAL de Sevilla, con 54 hectáreas de superficie y 220.000 m² de naves logísticas, está situada en el mismo centro de la ciudad y a pie de la ronda de circunvalación exterior SE-30 y rondas urbanas intermedias, lo que la convierte en un lugar idóneo para compatibilizar distribución local, regional, nacional e internacional.
En Bilbao, la ZAD se ubica en Zierbena y el puerto apuesta por Arasur como ZAL, por lo que no se cumplen las características señaladas de Algeciras, Barcelona o Sevilla, para satisfacer una logística de última milla en la capital vizcaína. Por el mismo motivo, la del puerto de Motril, que tiene una superficie de 380.000 m², también está más enfocada a la logística portuaria.
El deseo de otros puertos
Teniendo en cuenta la respuesta que el sector ha tenido con respecto a algunas de estas zonas, sobre todo en Algeciras y Barcelona, no es de extrañar que otras instalaciones portuarias quieran una ZAL propia para fomentar la llegada de nuevas empresas a su territorio. Por ello, esperan ubicarlas, en la medida de lo posible, muy próximas a los núcleos urbanos.
Durante los próximos años también está previsto que se pongan en marcha las ZAL de Alicante, Asturias (Zalia), Cartagena, Castellón, Ferrol, Las Palmas, Sagunto, Santander, Tarragona, Valencia y Vigo (Plisan).
[sumario]Proximidad a los núcleos urbanos y buenas conexiones, marcan el viraje de las ZAL hacia la distribución urbana de mercancías.[/sumario]
Sin embargo, algunas llevan años desarrollándose y no terminan de arrancar. La Zalia sigue sin actividad después de varios años y vuelve a estar al borde de la quiebra, algo que ya sucedió a finales de 2013, cuando su Consejo de Administración acordó refinanciar la sociedad. Tampoco llega la de Castellón, bautizada como ‘Parc Castelló’, que se proyecta en el Polígono Industrial de Serrallo desde el año 2003. Recientemente, catorce años después, la Generalitat Valenciana ha publicado un estudio en el que señala que dicho parque es la opción más idónea para instalar una plataforma logística intermodal en la región.
A ritmo lento, pero hacia delante, avanzan otras infraestructuras como la Plisan, cuya primera fase de los servicios generales está casi ejecutada por completo; y la de Cartagena, después de que Europa haya decidido financiar la mitad de la inversión de los estudios para su desarrollo.
Aunque también se está haciendo esperar la ZAL del puerto de Valencia, que el Tribunal Supremo tumbó en 2009, su desarrollo parece más cerca después de que la Generalitat Valenciana haya sacado a información pública, esta segunda semana de julio, el proyecto para su reactivación.
Zal del Puerto de Barcelona, diversidad de operaciones
La ZAL del puerto de Barcelona es el mejor ejemplo de la viabilidad de estas infraestructuras para todo tipo de operaciones. La construcción de una plataforma de frío de 18.200 m² para Carrefour y de una nave de ‘crossdocking’ de 16.900 m² para FedEx son algunas de las actuaciones acometidas en los últimos meses.
Además, Cilsa, compañía que gestiona esta superficie, está negociando la construcción de 150.000 m² de contratos ‘llave en mano’ con actores internacionales de primer nivel del sector textil, gran distribución, transitarios y e-commerce.